El exgobernador Javier Duarte de Ochoa asistió al servició médico, después de sufrir una baja de presión arterial la mañana de este sábado, derivado de la huelga de hambre que inició el pasado 17 de agosto.
Según reportes de las autoridades, el exmandatario estatal deberá permanecer en cama por indicaciones médicas hasta que se logre estabilizar su presión (80/50).
Trascendió que Duarte de Ochoa no aceptó que se le inyectará suero pese a ser diagnosticado con hipotensión y deshidratación, detalla el medio.
Cabe recordar que el exgobernador se declaró en huelga para exigir que pare la “cacería de brujas” en contra de sus excolaboradores y de él, además de acusar a la juez, Alma Aleida Sosa Jiménez, a quien acusó de “prestarse como instrumento político del actual gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares”.