El pintor, grabador, dibujante y escultor mexicano Sergio Hernández (Huajapan de León, Oaxaca, 1957) presenta en el Centro Cultural Tijuana (Cecut) la exposición Último tule, integrada por piezas representativas de sus distintos intereses artísticos, en su mayoría inéditas, las cuales que hacen un llamado al cuidado del planeta.
En la muestra, inaugurada el pasado viernes 1 de septiembre, dialogan 10 óleos sobre lino, 17 piezas mixtas, y una instalación formada por 118 piezas de cerámica que representan un trabajo de los últimos cinco años, explica el creador oaxaqueño, en entrevista con la Secretaría de Cultura.
A estas piezas se agregan un óleo de gran formato que da título a la muestra, y una instalación a las afueras de El Cubo, del Cecut, constituida por siete tules que un huracán derrumbó, intervenidos por el artista, símbolos de la acción de un planeta amenazado.
Sergio Hernández explica que en Último tule se reúnen dos referencias: una a la mitología clásica donde Thule fue una isla fabulosa situada en el umbral del reino de los muertos, que los navegantes creían que al llegar ahí caerían a un abismo, y al árbol icónico de Oaxaca que sus habitantes escogieron para simbolizar la vitalidad de la naturaleza y la fuerza de un pueblo.
“Hago estas fusiones para recrear una serie de obras que tienen que ver con México, es una transformación literaria en una representación visual”, indicó.
La pieza Último tule, es un óleo sobre lino, donada al Cecut y realizada especialmente para la exposición. El curador de la misma, Giorgio Antei, la describe como una obra magistral que condensa y corona una búsqueda expresiva de tres décadas.
El artista explica que su intención es que dicha pieza quede como un testimonio del último tular. “Quisiera que la gente vea la gran tragedia ecológica que está sucediendo en este país. Hoy día estamos comiendo por dos planetas, la producción de alimentos está al doble de lo normal, por lo que necesitaríamos de otro planeta para sobrevivir. Debemos cuidarlo y como creador hago este planteamiento”.
Ahondó en que la instalación de esculturas consiste en la intervención de siete tules, los cuales fueron derrumbados por un huracán, enterrados y posteriormente desenterrados para intervenirlas.
“Con ellas se representa la devastación del ambiente que se ha visto afectado por la tala de bosques y la extinción de las especies vegetales”, puntualizó.
La exposición combina estas piezas inéditas y obras que han marcado la trayectoria artística del creador, como son sus plomos, y destacó que recientemente ha usado basura natural como son las ramas para crear su obra.
“En la exposición se expone la serie Los ardientes, que pinté con cinabrio dedicada a la obra Crucifixión de Matthias Grünewald, uno de los nueves paneles que componen la obra maestra del pintor alemán, El retablo de Issenheim, en la que sobresale el color rojo, generado por la grana de cochinilla, y un pigmento de nopal.
“Este color rojo siempre me está recordando mi identidad, a los mercados, las sandias, los tamales, es un tono de rojo muy significativo y representativo de México, y que he usado en los últimos 40 años”.
Finalmente Hernández dijo que Último tule es una muestra de sus últimos cinco años de trabajo y que representan, si no una culminación, sí una serie de obras que pueden dialogar entre ellas y que le ha costado reunir.
“Creo son piezas que pueden ser ricas, porque son una luminosidad y una experiencia que difícilmente vamos a encontrar en una obra común. Estoy convencido de que es un encuentro y hallazgo que vale la pena ver”.
Además de su exposición en el Cecut, Sergio Hernández llevará su propuesta artística al Centro Cultural Santo Domingo, donde se exhibirá El inventor de mapas, a inaugurarse en el mes de octubre, también vislumbra un nueva muestra en Japón.
Sergio Hernández es un artista multidisciplinario que estudió en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda, de 1975 a 1981. Ha presentado exposiciones individuales y colectivas en México, Alemania, Suecia, Bruselas, Cuba, Italia y Japón, entre otros.
La exposición Último tule puede visitarse en la Sala 2 de El Cubo en el Centro Cultural Tijuana, en un horario de martes a domingo de 10:00 a 19:00 horas. Entrada general $48.00, los domingos la entrada es libre.
