Con apenas unos días como nuevo gobernador del estado de Nayarit, Antonio Echevarría y su equipo hallaron que el exmandatario Roberto Sandoval dejó adeudos po 2,300 millones de pesos en ciencia y tecnología, educación y salud.
Un día después de asumir el cargo – 19 de septiembre –, Echevarría ordenó una auditoría en las áreas del sector público, ante las irregularidades de la administración anterior y aseguró que denunciará a los exfuncionarios involucrados.
Mientras tanto, el exgobernador Roberto Sandoval – investigado por la Procuraduría General de la República (PGR) por un supuesto enriquecimiento ilícito y a quien versiones extraoficiales señalaron había abandonado Nayarit en un jet privado para huir a Perú – transmitió a través de su cuenta de Facebook una visita a la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México.
«En la Basílica, casa de nuestra madre de Guadalupe escuchando misa y aceptando su voluntad no la mía«, escribió horas antes.