Las autoridades brasileñas que investigan al presidente del Comité Olímpico del país, Carlos Nuzman, en un caso de compra de votos han pedido ayuda a la fiscalía de Suiza, donde se cree que almacenó lingotes de oro.
La fiscalía general suiza dijo este viernes que estaba “analizando” la solicitud de asistencia legal remitida por la Oficina Federal de Justicia.
Nuzman fue detenido el jueves en Río de Janeiro como sospechoso de obstruir la investigación, un mes después de ser detenido e interrogado por las autoridades brasileñas y francesas. La fiscalía también cree que guardó 16 lingotes de oro en un depósito en Ginebra.
Como presidente del Comité Olímpico Brasileño, Nuzman lideró la candidatura olímpica de 2016 y los comités organizadores.
La fiscalía ha implicado a Nuzman en una trama de sobornos de al menos 2 millones de dólares para ayudar a ganar votos de miembros del COI, que escogieron a Río como ciudad anfitriona en 2009 en una competición entre cuatro ciudades. Las derrotadas fueron Chicago, respaldada por el entonces presidente Barack Obama; Madrid y Tokio.
El Comité Olímpico Internacional -con sede en Lausana, Suiza- estudia si suspende de forma provisional a Nuzman, de 75 años. Ahora es miembro honorario de la institución tras sobrepasar el límite de edad de 70 años.
Nuzman también forma parte de un comité del COI que supervisa los preparativos para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
La fiscalía brasileña ha dicho creer que Nuzman fue una figura clave para desviar al menos 2 millones de dólares de dinero de un empresario brasileño al senegalés Lamine Diack, exmiembro del COI y que ayudó a controlar los votos africanos.
Diack fue detenido en Francia por un escándalo más amplio de supuesta corrupción cuando era presidente de la Federación Internacional de Atletismo que habría incluido chantajear a atletas para que ocultaran casos de dopaje.
El caso en Francia también ha implicado al velocista namibio Frank Fredericks, ganador de cuatro medallas olímpicas. Era miembro de la junta directiva del COI en octubre de 2009, cuando recibió un pago de 300.000 dólares relacionado con Brasil y la familia Diack el día que Río consiguió los Juegos.
La fortuna de Nuzman aumentó un 457 por ciento en sus últimos 10 años al frente del Comité Olímpico Brasileño, según dijeron el jueves las autoridades brasileñas.
El sospechoso fue detenido porque los investigadores descubrieron que había intentado entorpecer las pesquisas al regularizar activos probablemente conseguidos con dinero ilícito. El mes pasado habría enmendado su declaración de impuestos para incluir unos ingresos adicionales de 600 mil dólares.
Los abogados de Nuzman afirmaron que niega cualquier mala práctica, y el COI señaló que tiene presunción de inocencia mientras la comisión de ética estudia el caso.