Cuatro niños y un profesor murieron y varias personas más resultaron heridas en una guardería en el este de Brasil cuando un guardia de seguridad roció alcohol en las instalaciones y provocó un incendio el jueves, informaron las autoridades.
El hecho ocurrió en el municipio de Janaúba, cuando el guardia que custodiaba el Centro Municipal de Educación Infantil Gente Inocente, tras hablar con la directora de la institución, arrojó el líquido inflamable sobre los niños y sobre él mismo y prendió fuego.
Un bombero de Janaúba dijo por teléfono que el guardia, que supuestamente sufre un trastorno mental, tuvo quemaduras graves en todo el cuerpo y falleció la tarde del jueves.
El bombero, que se negó a proporcionar su nombre, indicó que la mayoría de las víctimas tenía entre 1 y 4 años.
El bombero identificó al guardia como Damiao Soares dos Santos, de 50 años, y que había ayudado con la seguridad en el centro desde 2008. Agregó que el incidente también murió un profesor.
Soares trabajaba en la guardería Gente Inocente desde 2008; las autoridades investigan las causas por las que decidió prender fuego a los menores.
Según las primeras indagatorias, Soares podría haber premeditado el crimen, ya que la Policía encontró varios barriles con gasolina en el interior de su vivienda.
La Policía Civil sospecha que el empleado escogió una fecha «simbólica», pues el crimen fue cometido el mismo día en el que su padre falleció tres años atrás.
La guardería en Janaúba, en el estado de Minas Gerais, brinda servicio para cerca de 70 niños, de acuerdo con medios locales.
En un tuit, el presidente brasileño Michel Temer dijo: “Lamento intensamente esta tragedia con los niños en Janaúba. Quiero expresar mi solidaridad con las familias”.