A unas horas de que entrara en vigor el miércoles la última versión del decreto migratorio del magnate Donald Trump, un juez federal en Hawái bloqueó una gran parte de la orden por considerar que “sufre precisamente de los mismos males que su predecesora”.
Es la tercera ocasión en que las restricciones migratorias emitidas por Trump se ven frustradas, en gran parte, por los tribunales.
El juez de distrito Derrick Watson falló el martes en contra de las restricciones luego de que el decreto, que afecta en su mayoría a naciones musulmanas, fue impugnado por el estado de Hawái. El estado advirtió que las restricciones separarían a familias y perjudicarían el reclutamiento de estudiantes universitarios.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, describió el fallo como “peligrosamente erróneo” y dijo que “socava las iniciativas del presidente para mantener a los estadounidenses a salvo”. El Departamento de Justicia indicó que apelará rápido la decisión.
En cuestión está una medida, anunciada en septiembre y programada para entrar en vigor el miércoles por la mañana, que impide la entrada a Estados Unidos de viajeros provenientes de Chad, Irán, Libia, Corea del Norte, Somalia, Siria y Yemen, junto con algunos funcionarios del gobierno venezolano y sus familias.
El gobierno del presidente Trump dijo que el decreto se basa en una revisión de la situación en materia de seguridad de cada país y de su disposición para compartir información con Estados Unidos.
Watson, quien fue nombrado por el expresidente Barack Obama, dijo que las nuevas restricciones ignoran el fallo de un tribunal federal de apelaciones en contra del decreto previo de Trump.
La última versión “llanamente discrimina en función de la nacionalidad en la forma en que el Noveno Circuito ha encontrado que es antiético a… los principios fundadores de esta nación”, escribió el juez.
El fallo del juez de distrito sólo aplica para los países, en su mayoría musulmanes, que forman parte de la lista. No afecta a las restricciones contra Corea del Norte o Venezuela, debido a que el estado de Hawái no pidió que así fuera.
“Esta es la tercera ocasión en la que Hawái acude a un tribunal para impedir que el presidente Trump emita una prohibición que discrimina a las personas con base en su nacionalidad o religión”, dijo Doug Chin, fiscal general de Hawái, en un comunicado. “Hoy el estado de derecho se anota otra victoria”, agregó.