Toyota confirmó este miércoles su decisión de reducir en 30 por ciento la inversión prevista en su nueva planta en Guanajuato, así como recortar a la mitad su capacidad de producción.
En 2015 había anunciado que invertiría mil millones de dólares con un plan para construir 200 mil autos del modelo Corolla al año, tras el recorte, la producción quedará fijada en 100 mil unidades anuales.
Didier Leroy, vicepresidente ejecutivo de la automotriz, explicó que la producción del vehículo irá a una planta conjunta con Mazda Motor Corp., en los Estados Unidos.
Cabe señalar que a pesar de que Toyota aseguró que la medida no tiene que ver con las políticas de Donald Trump, la planta en territorio mexicano había estado en la mira del mandatario estadounidense a tal punto que advirtió a la automotriz aumentar los aranceles si continuaba con su plan.