Una mujer poblana de 31 años de edad fue ultimada de un tiro en la cabeza en Tuxpan, Veracruz, luego de pagar el rescate de su marido, sin saber que éste ya había sido asesinado.

Se trata de P.B.G. y su esposo Justo Bautista Aburto, originarios de Xiutetelco, Puebla, quienes se dedicaban a comercializar fuegos pirotécnicos. La pareja había llegado hace una semana al estado veracruzano y tenía un puesto en Pánuco, donde fue secuestrado.

Los criminales exigieron un pago de 400 mil pesos para liberarlo, y aunque la esposa y familiares juntaron el dinero, la víctima fue desmembrada para luego ser colocada dentro de una bolsa negra.

Ignorando esto, P. B. G. acudió a Tuxpan, a donde los secuestradores la citaron para que pagara el rescate y, tras entregar el dinero, le dispararon. Su cuerpo fue hallado en la calle Crispín Bautista esquina con Nicolás Bravo.