En la quinta ronda de negociaciones para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) se decidió que el tema de energía tenga su propia mesa técnica, aunque aún no deciden si será un capítulo dentro del acuerdo, o si se integrará a distintos capítulos.

“Se está discutiendo si habrá un capítulo energético, lo que es buena señal para México, dada la reforma energética y todo lo que está pasando en el sector. Es muy importante que el tema se integre a otros capítulos o que se tenga uno en específico de este tema”, dijo Moisés Kalach, coordinador del Cuarto de Junto del sector privado.

El ejecutivo explicó que las disposiciones que se acuerden en esta materia deberán ayudar a que se reafirme la reforma energética de México, además de dar seguridad a las inversiones del sector, explicó Kalach.

Estados Unidos busca que en materia energética, el TLCAN preserve y fortalezca las inversiones, el acceso a los mercados, al igual que impulsar disciplinas para las empresas del Estado en beneficio de la producción, transmisión, independencia y seguridad energética de la región de América del Norte.

En ocasiones repetidas, Castañón ha referido a la prensa, que éste se reducirá con la llegada de empresas que inviertan en energía y que importen desde México insumos estadounidenses para el desarrollo de esa industria.

Además, las disposiciones que queden asentadas para el comercio electrónico y las inversiones en el nuevo TLCAN, contribuirán a reducir el déficit.

Cabe mencionar que el 14 de noviembre se reunieron en la ciudad de Houston, el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, Rick Perry, secretario de Energía de Estados Unidos y Jim Carr, ministro de Recursos Naturales de Canadá.

Por igual busca que se promuevan las continuas reformas para apertura del mercado energético, refiere el documento de los objetivos actualizados para modernizar el tratado, que Estados Unidos dio a conocer el viernes pasado.

De acuerdo con el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón mejorar las condiciones para las inversiones en materia energética, entre los tres países socios, es una de las condiciones que pueden contribuir a reducir el déficit comercial de Estados Unidos.

Entre los temas que trataron estuvieron la seguridad energética en la región, cómo aprovechar los recursos energéticos norteamericanos, el impulso de proyectos de infraestructura transfronteriza e identificación de oportunidades de colaboración, según información de la secretaría de Energía.

Estados Unidos, es el principal proveedor de energéticos para México. En 2016, México importó 19,212 millones de dólares (mdp) de gas natural, gasolinas, diesel, aceites, lubricantes y gas LP. Tan sólo el 60% de la gasolina que los mexicanos consumen al año, es de origen estadounidense, refieren datos del Buró de Censos de ese país.