El expresidente de Ecuador, Rafael Correa, regresó a su país por primera vez desde que dejó el cargo, mientras se prepara para una lucha política con Lenin Moreno, a quien designó como su sucesor.
Correa fue recibido por decenas de simpatizantes después de que llegó el sábado a Guayaquil poco después de medianoche en un vuelo privado desde la vecina Colombia. Correa ha vivido en Bélgica desde que entregó el poder al presidente Lenin Moreno en mayo.
El exmandatario regresó a Ecuador para asistir a una convención donde se espera que sus partidarios expulsen a Moreno como líder del partido gobernante Alianza País; sin embargo, los aliados de Moreno y un tribunal electoral consideran que el congreso del partido es ilegal.
Correa ha acusado a Moreno de traicionar su legado al fomentar políticas económicas conservadoras y al perseguir a aliados cercanos, como el vicepresidente Jorge Glas, quien fue encarcelado bajo cargos de corrupción.
El fiscal general, Carlos Baca, formuló el pasado 9 de noviembre una acusación en contra Jorge Glas, exvicepresidente de Ecuador, lo acusa por ser autor del delito de asociación ilícita por supuestos sobornos de la constructora brasileña Odebrecht en el país.
Lenín Moreno asumió la presidencia de Ecuador el pasado 25 de mayo; en el evento oficial, ratificó que su gobierno será austero, mantendrá la dolarización, adelantará programas sociales y sostendrá un diálogo permanente.
