Nikki Haley, representante permanente de Estados Unidos ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), advirtió a los países miembros del organismo, que cortaría la ayuda ante un voto de condena sobre la decisión de designar a Jerusalén como la capital de Israel.
“Al considerar su voto, quiero que sepan que Donald Trump y Estados Unidos, toman este voto de manera personal”, escribió Haley en una misiva enviada a numerosas misiones diplomáticas ante la ONU, difundida por la publicación Foreign Policy.
Después de que una resolución fuera vetada el lunes pasado por la delegación estadounidense en el Consejo de Seguridad, Haley hizo referencia al voto programado para este jueves ante la Asamblea General de la ONU.
“Tomaremos nota de todos y cada uno de los votos sobre este tema, vamos a observar esos votos, déjenles votar contra nosotros, ahorraremos mucho, no nos importa” declaró.
También afirmó que el presidente del país norteamericano, confirmó lo sucedido en una reunión de gabinete en la Casa Blanca.
Cabe resaltar que un voto mayoritario de condena en la Asamblea General a la decisión de Estados Unidos conferiría apoyo moral y diplomático a la oposición de Palestina.