La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) realizó una nueva recomendación y urgió a reparar el daño que provocó el gobierno del municipio de Mecatlán, Veracruz, al obstaculizar el acceso a la justicia a una menor que fue violada, presionándola para no denunciar, proteger al presunto culpable e impugnar una primera recomendación de la CEDH.
El delito sucedido el 28 de octubre de 2015, cuando la niña integrante de la comunidad indígena totonaca de Manantiales, en el municipio referido, fue privada de la libertad por uno de sus vecinos, conducida por la fuerza a un cafetal y atacada sexualmente por el individuo.
Cuando la menor y sus familiares acudieron a las autoridades municipales para denunciar, los responsables de asistirla se rieron de ella.
Cásate con tu violador
Un día después, el alcalde Gerónimo Luis Hernández, del Partido del Trabajo (PT), le ofreció llegar a un acuerdo que consistía en una compensación económica o casarse con su agresor.
“No me mandes a Papantla, me van a matar y comenzó a llorar; me ofreció dinero y me dijo que me compraría un solar”, declaró la víctima sobre lo que le propuso el sujeto que la atacó.
“Los policías me dijeron: cásate con él, al igual que el licenciado… pero tanto yo como mi padre dijimos que no queríamos dinero ni nada. Me tuvieron en ese lugar como una hora… (hasta que) el chofer de la policía recibió una llamada y al término dijo: vámonos, ya los están esperando en Papantla y si no la llevamos van a venir por ella”.
Debido a la intervención del alcalde, el agresor volvió al pueblo unas horas después libre de cargos e incluso, hasta la fecha, permanece en libertad. La víctima fue quien abandonó la localidad por miedo a represalias de parte del violador, de su familia o de las mismas autoridades.
Alcalde rechaza a la CEDH
Fue hasta agosto de 2016 cuando la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Veracruz emitió su recomendación 19/2016, ordenando al alcalde de Mecatlán iniciar una investigación administrativa en contra de los funcionarios que encubrieron y permitieron la fuga del agresor sexual.
Hernández también debía indemnizar a la afectada por los daños que el proceder de su personal le había ocasionado, entre los que destacan afectaciones psicológicas, secuelas físicas por una tardía y deficiente atención médica, y garantizar su seguridad personal; además, el alcalde debía establecer mecanismos de capacitación para los funcionarios en materia de derechos humanos y atención a víctimas.
Sin embargo, el munícipe ignoró a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), siendo hasta octubre de dicho año cuando oficializara su rechazo a lo dispuesto, argumentando que era “totalmente falso” que los policías actuaran negligentemente y aseguró que el agresor fue liberado al no comprobarse su responsabilidad.
CNDH inicia investigación
Tras la negativa de Gerónimo Luis Hernández a reconocer los abusos contra la menor, la Comisión Nacional de Derechos Humanos inició su propia investigación.
Al percatarse de esto, el alcalde intentó simular que había aceptado y acatado parcialmente las órdenes de la CEDH, presentando un informe en donde asegura que inició procesos administrativos contra dos elementos policiales, emitiendo una amonestación privada, no presencial, en contra de ambos el 17 de marzo de 2017.
“Por medio de la presente, me dirijo a usted para manifestarle nuestra decisión de formularle amonestación escrita por la actitud asumida por su persona, en relación al procedimiento número 02/2017, consistente en una amonestación privada de acuerdo a la responsabilidad administrativa en que incurrió como servidor público por violentar derechos a la víctima, de acuerdo a la recomendación 19/2016 emitida por la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Estado de Veracruz, y se les pide no volver a incurrir en actos de violación a derechos humanos”, se lee en la presunta amonestación que ni siquiera fue firmada por el munícipe.
Esa fue la sanción de los dos policías involucrados, mientras que Luis Hernández y el agente que se burló de la menor al presentar la denuncia, no enfrentaron ningún castigo.