En un centro comercial de Taiyuan, Pekin, fue exhibida una estatua del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sin embargo fue en forma de perro.

Como una forma de darle la bienvenida al Año Nuevo Chino, el cual es correspondiente al año del perro, esta figura fue puesta como decoración estrella del Año Nuevo Lunar.

Fue colocada dos meses después, en la misma entrada de un centro comercial donde el “Pollo de Trump” se hizo famoso, una estatua gigante de Donald Trump caracterizado como pollo, la cual se volvió popular en China.

 

 

Esta estatua es claramente identificable por el color del pelo y las cejas, el tupé y el dedo índice de una de sus patas señalando hacia arriba, imitando un gesto característico del mandatario norteamericano durante sus intervenciones públicas; además tiene un collar rojo, haciendo referencia al color favorito de Trump al usar corbatas.

Si esta tradición se mantiene, Trump se podría convertir en un cerdo gigante para 2019 y en una rata gigante en 2020, esto según los animales que regirán de acuerdo al calendario chino.

Esto hace que Trump sea el primer presidente estadounidense en formar parte de tan peculiar tradición, ahora es el perro de fuego marcado en el horóscopo chino, y es considerado por la cultura oriental como alguien asociado a la inteligencia, el duro trabajo y la sinceridad.