El ministro de Economía de México Idelfonso Guajardo, dio declaraciones en las que dejó entrever que el país debería “ser sensible” ante las exigencias de Estados Unidos en diversos puntos sobre el sector automotriz.
Durante su participación en la XXVIII Reunión Anual de Embajadores y Cónsules, en la cancillería mexicana, Guajardo señaló que hay un terreno común sobre un objetivo clave de Estados Unidos en las conversaciones, diciendo que el fortalecimiento de las normas de contenido regional para los automóviles ofrece una oportunidad de lograr una victoria para las tres naciones.
“La solución es, sin duda, una regla de origen reforzada en el contenido automotriz regional”, dijo. “La lista de rastreabilidad para algunos componentes del automóvil necesita ser reconsiderada en vista de las nuevas tecnologías para enviar señales adecuadas sobre el fortalecimiento de las cadenas de valor en América del Norte”, dijo.
La regla de origen a la que se refiere el ministro mexicano es que, para continuar las negociaciones, Estados Unidos ha insistido en que se produzcan más automóviles en su territorio, y demandó elevar el umbral mínimo del contenido regional en los vehículos de62.5% a 85%. Sin embargo, Canadá y México habían mostrado una rotunda oposición.
La propuesta es el centro del presidente estadounidense Donald Trump para volver a traer empleos de manufactura a Estados Unidos, aunque enfrenta una fuerte resistencia de la industria automotriz, que cuestiona su viabilidad.
En las rondas pasadas, funcionarios mexicanos y canadienses habían dicho que esperaban que Estados Unidos explique cómo podría prosperar su plan automotriz y que no responderían con una contrapropuesta.
Para México este punto es crucial debido a que, de acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), al cierre de 2016 el 86% de las exportaciones se concentró en el área de América del Norte.
Además, actualmente la industria automotriz representa el 3% del PIB de México.
Por esta razón, Guajardo, aseguró que la siguiente ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), en Montreal, “será decisiva para desatorar los temas más importantes” y también los poco valiosos, pero polémicos, como la cláusula para revisar cada cinco años el acuerdo.
Los negociadores se reunirán en Montreal del 23 al 28 de enero para la sexta de las siete rondas previstas de conversaciones, con grandes diferencias entre los Estados Unidos por un lado y México y Canadá por el otro. Las conversaciones están programadas para concluir a fines de marzo.