La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) dio a conocer que policías federales cometieron actos de tortura contra una familia compuesta por los padres y tres niñas, en Tabasco durante 2015.
La Comisión acreditó que los elementos federales incurrieron en privación ilegal de la libertad, violaciones a los derechos humanos y actos de tortura contra la familia, en una recomendación dirigida a la PGR y a Renato Sales Heredia, titular de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), señaló el medio Sin Embargo.
Los hechos ocurrieron el 6 de noviembre de 2015 a las 13:30 horas, cuando al llegar a su domicilio en el municipio Centro, Tabasco, la familia fue detenida por federales, quienes entraron a la casa para sustraer diversos objetos.
De acuerdo con la declaración de la mujer, los policías subieron a su esposo a una unidad oficial y ella, junto a sus hijas de 1, 6 y 8 años de edad, fueron obligadas a abordar su propio vehículo, les cubrieron el rostro y las amenazaron con dispararles.
Durante el lapso que permanecieron cautivas, las niñas no tuvieron permitido ir al baño, teniendo que realizar sus necesidades en su ropa y tampoco recibieron alimentos.
Luego fueron llevadas a un sitio desde el que escucharon los gritos del padre que le provocaron los golpes de los agentes.
El 7 de noviembre, a las 13:00 horas, las cuatro integrantes de la familia fueron abandonadas en una carretera bajo amenaza de que si denunciaban lo ocurrido, las dañarían; el esposo, quien trabajaba en la Fiscalía General del Estado (FGE), fue puesto a disposición de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido), al igual que uno de sus compañeros de trabajo; los dos enfrentan un proceso penal por probable responsabilidad en delitos de orden federal.
La CNDH acreditó la detención ilegal de la mujer y las niñas, pues no se les atribuía ningún delito; en cuanto al padre, existen elementos suficientes para determinar una detención arbitraria, ya que si bien se le imputaba la comisión de un delito, no se cumplieron los requisitos constitucionales establecidos para llevar a cabo su aseguramiento.
Asimismo, se acreditó que fueron cometidos actos de tortura en contra de dos de las niñas y su madre por las amenazas en su contra, privaciones a las que fueron sometidas y exponerlas a oír la tortura contra el padre, quien fue agredido para que aceptara los delitos que le imputaban, concluyó el organismo.
Hasta el momento la PGR no ha realizado las investigaciones necesarias, pesa a existir una denuncia oficial; además de que un funcionario proporcionó información errónea sobre el caso a la CNDH.