Fueron enterrados sin presencia de sus familiares los cuerpos de los venezolanos sublevados contra el Gobierno de Nicolás Maduro y que terminaron muertos en un operativo policial el pasado 15 de enero.

Entre tanto, periodistas venezolanos denunciaron que el cuerpo de Oscar Pérez, exagente policial de 36 años, fue también enterrado sin presencia de la familia. Sin embargo un video en redes mostraría que el cuerpo de Pérez aún estaría en la morgue sin que sus familiares sepan con certeza su ubicación.

“A Oscar Pérez lo están enterrando sin la presencia de la familia. Tienen a varios familiares de los ejecutados en el Junquito sin poder ingresar al Cementerio”, señaló la periodista Carla Angola en su cuenta de Twitter.

Pese a esta denuncia, a través de las redes sociales fue difundido un video de la madre de Óscar Pérez, Aminta Pérez, quien de manera desesperada dijo que quería el cuerpo de su hijo “para enterrarlo donde ella quiera”.

Se confirmó que los primeros en ser enterrados fueron Abraham Agostini y José Alejandro Díaz Pimentel, dos de los que formaban parte del grupo mientras que otros dos cadáveres fueron enviados a sus ciudades de origen.

En videos publicados en esta red social, los familiares reclaman abuso del gobierno venezolano porque les ha obligado a enterrar en un lugar especifico a sus seres queridos.

“Obligan a familiares de la masacre de El Junquito a enterrar a sus seres queridos en el Cementerio del Este. Esta es la familia de Abraham Agostini y otros de los ejecutados. Claman ayuda del país y oración. ¿Cuánto dolor?. La dictadura no tiene medida en su crueldad”, indicó Angola en un video publicado en Twitter.

 

Entre tanto, el ex militar César Guardiola también denunció en Twitter lo ocurrido: “entierro de líderes rebeldes con más custodia que una cumbre presidencial… no hay acceso para nadie solo familiares directos pudieron enterrarlo”.

Entre denuncias de “ejecución extrajudicial”, familiares y grupos de derechos humanos exigieron el miércoles, sin éxito, la entrega de los cuerpos del piloto Óscar Pérez, protagonista de sonadas acciones contra el gobierno de Nicolás Maduro, y de los otros seis abatidos en un operativo de seguridad.

Militares y policías mantenían cerrado el acceso a la Morgue de Bello Monte, principal de Caracas (sureste). A Aura Pérez, tía del piloto muerto el lunes a manos de las autoridades, le permitieron ingresar: “Vine a reconocer el cuerpo de mi sobrino y exigir que me lo entreguen. Lo enterraremos aquí en Caracas, donde nació”, declaró.

Parientes de los otros muertos también llegaron.

“Pido encarecidamente (…) al presidente Maduro, con todo mi dolor y el de mi familia, que por favor, por el derecho que nos corresponde, se respete nuestro dolor y dejen de obstruir y nos entreguen el cuerpo de mi hijo”, clamó llorosa Zeila Agostini, madre de Abraham Agostini.

Rodeada de una comisión de parlamentarios opositores que investiga los hechos, Agostini sostuvo que su hijo “murió como un héroe” y que se enroló en el grupo de Pérez –señalado por el gobierno de “terrorista”– por la grave situación del país.