Varios organismos de Naciones Unidas prometieron intensificar los esfuerzos para combatir el acoso sexual y proteger a las víctimas tras las noticias sobre una «cultura del silencio» e impunidad en las oficinas de la ONU en todo el mundo.

Importantes organismos de Naciones Unidas, incluido el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la agencia para los refugiados (ACNUR), dijeron que despidieron a varios empleados el año pasado y que estaban revisando o reformando sus políticas contra el acoso en medio de la inquietudes por la falta de denuncias ante los abusos.

Los cambios más amplios incluyen sanciones más estrictas para los acosadores, una mejor protección para los denunciantes y un límite de tiempo para que los empleados denuncien conductas sexuales inapropiadas.

«No hay lugar para la explotación, el abuso y el acoso sexual, especialmente en una organización dedicada a servir y proteger a otros», dijo un portavoz del ACNUR.