Cinco cadáveres decapitados fueron abandonados frente a una casa funeraria en la cabecera municipal de la Sierra Tarahumara, en el estado de Chihuahua.
De acuerdo con la información proporcionada por la Fiscalía General del Estado (FGE) cuatro hombres a bordo de un vehículo Pick up marca Dodge línea Ram, color rojo, arribaron a la funeraria ‘Guemar’, lugar en donde dejaron dos cuerpos decapitados, con múltiples heridas producidas por proyectil de arma de fuego.
No obstante, horas más tarde, se presentó en la misma funeraria, el conductor de una camioneta roja, quien llevó tres cadáveres decapitados más, de los cuales uno fue identificado como Israel Portillo Gil, de 32 años, residente de los Mochis, Sinaloa.
Hasta el momento se habla que dicho suceso se podría derivar de una supuesta rivalidad de dos bandas criminales dedicadas al trasiego de drogas, que habrían tenido un enfrentamiento en alguna parte de la sierra.
En tanto, la Comisión Estatal de Seguridad, la Agencia Estatal de Investigación y la Secretaría de la Defensa Nacional implementaron un operativo para tener mayores indicios que permitan esclarecer lo acontecido, de acuerdo con el diario Reforma.