Este jueves la Casa Blanca amenazó con vetar el plan inmigratorio del Senado que estaba surgiendo como la mejor esperanza para un convenio legislativo, arruinando probablemente los intentos congresistas por proteger de la posible inmigración a los inmigrantes indocumentados jóvenes conocidos como dreamers.
La secretaria de prensa Sarah Huckabee Sanders dijo en comunicado que la administración “se opone abiertamente” a la propuesta dada a conocer un día antes cuyos autores intentaron incorporar elementos del marco inmigratorio de Trump a fin de logar su respaldo. Sin embargo, la iniciativa legislativa —que este jueves se propondría como reforma en el Senado durante la ronda de votos inmigratorios— difería en ciertas áreas clave de dicho marco.
El plan de la autodenominada “Coalición del Sentido Común” empeoraría la política inmigratoria “al volver más débil la seguridad fronteriza”, dijo Sanders. Si el plan llegara al escritorio de Trump, los asesores presidenciales “recomendarían vetarla”, añadió.
Por la tarde, Trump tuiteó que el proyecto de ley “sería una total catástrofe” y reiteró su apoyo para la alternativa más conservadora presentada por el senador Charles E. Grassley a la cual se oponen los demócratas.
“Votar a favor de esta reforma sería un voto CONTRA las corporaciones policiacas y un voto A FAVOR de las fronteras abiertas”, escribió Trump. “Si los demócratas realmente hablan del DACA en serio, ¡deben apoyar la iniciativa Grassley!”
Las amenazas de la Casa Blanca se dieron horas antes de que los senadores se prepararan para someter a votación las propuestas inmigratorias, todas las cuales parecían destinadas al fracaso, y los líderes republicanos poco hacían por facilitar un acuerdo bipartidista.
En un tuit matutino, al parecer Trump reiteró su llamado a poner fin al programa de lotería de diversidad en las visas, el cual no se menciona en el plan bipartidista anunciado a altas horas del miércoles.
En los primeros minutos del jueves, el Departamento de Seguridad Interna dijo que la propuesta del grupo encabezado por la senadora republicana Susan Collins y el senador demócrata Joe Manchin III “destruye la capacidad” de la dependencia para vigilar la aplicación de las leyes inmigratorias y representa una “indignante violación” del marco inmigratorio de Trump.
Respondiendo al comunicado durante una conferencia de prensa sobre la propuesta bipartidista, el senador republicano Linsey O. Graham dijo haber pensado “¿Quién diablos escribió esto? Porque parecía algo procedente de una gaceta política, no del Departamento de Seguridad Interna”.