Durante el Clásico de la Paz entre los equipos de Vitória y Bahía de la primera división en Brasil, la celebración de un gol hizo que se protagonizara una pelea campal entre los jugadores, dejando a 10 futbolistas expulsados.
Vitória ganaba por 1-0 en el descanso, pero pocos minutos después de empezar la segunda parte, Bahía empató con un gol de penalti de Vinicius.
El enfrentamiento comenzó tras el gol del empate de Bahía, marcado por Vinicius Barbosa, en los primeros cuatro minutos del segundo tiempo.
Festejó con su tradicional baile frente a la afición contraria, lo que provocó el enojo de los jugadores de Vitória; el juego fue detenido durante 16 minutos para calmar los ánimos, pues hubo golpes de por medio.
El árbitro central, Jaílson Macedo, posteriormente a los hechos violentos expulsó a Vinicius, Lucas Fonseca, Edson y Rodrigo Becao de Bahía, y a Kanu, Denílson y Rhayner de Vitória.
Pero al llegar el minuto 32 mandó a las regaderas a Uillian Correia del Vitória al recibir la segunda tarjeta amarilla por una falta sobre Zé Rafael, a lo que los jugadores de Vitória, protestaron e intentaron evitar la reanudación del juego.
Bruno Bispo del mismo equipo, recibió la expulsión por acumular dos tarjetas amarillas ya que impidió el cobro de la falta, a lo cual el Vitória se quedó con el mínimo de jugadores para continuar el encuentro.
Fue entonces que el árbitro terminó el juego por lo que Bahía podría ser declarado ganador en este «Clásico de la Paz» lo que pretendía mantener la calma entre ambas hinchadas.
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