Nicolás Maduro promete dar una paliza a sus adversarios y baila al ritmo de reguetón en Venezuela. Como se sabe, Maduro se lanzó formalmente como candidato para las elecciones del próximo 22 de abril.
«¡Todos con Maduro, lealtad y futuro!». Al ritmo de este estribillo el mandatario se paseó con su esposa, Cilia Flores, por una tarima instalada frente a la sede del poder electoral en Caracas.
Lo hizo tras inscribir su candidatura ante las máximas autoridades electorales, con un despliegue que contrastó con los deslucidos actos que acompañaron el trámite de otros dos postulantes desconocidos.
Nicolás Maduro, quien busca un segundo período hasta 2025 en los comicios convocados de forma anticipada por la oficialista Asamblea Constituyente, volvió a retar a la oposición a competir, en particular al veterano parlamentario Henry Ramos Allup.
«Todavía tienen chance de inscribirse. No aguanto darte una pela con diez millones de votos. ¡Inscríbete cobarde!», lanzó el gobernante socialista.
Maduro había llegado al Consejo Nacional Electoral (CNE) en un jeep rojo -el color que identifica al chavismo- conducido por el poderoso dirigente Diosdado Cabello y a bordo del cual iba su círculo íntimo.
Miles de simpatizantes acompañaron la caravana por calles del centro de Caracas, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad.
«¡Vamos Nico! ¡Vamos Nico!», coreó la masa mientras el presidente repartía saludos y besos a los curiosos en los pisos altos de los edificios. Se trata del eslogan de campaña, en el que la abreviatura del nombre desplazó el apellido.