Hope Hicks, una de las más veteranas asesoras del presidente estadounidense Donald Trump, renunció a su puesto como directora de comunicaciones de la Casa Blanca, dijo su vocera, Sarah Sanders.
La joven de 29 años, que se había sumado a la campaña del magnate inmobiliario desde el principio sin ninguna experiencia política, ocupaba el cargo desde septiembre.
«Hope es sobresaliente y ha hecho un gran trabajo durante los últimos tres años», dijo Trump, al comentar el anuncio, destacando que «extrañará tenerla a su lado» más allá de entender «totalmente» su decisión de buscar «otras oportunidades».
«No hay palabras para expresar adecuadamente mi gratitud al presidente Trump», señaló por su parte Hicks en otra declaración.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo que Hicks es una «valorada consejera» del mandatario y otros altos funcionarios del gobierno, y descartó que su decisión esté vinculada a su rechazo a contestar preguntas en una audiencia el martes en el Congreso sobre la posible injerencia rusa en las elecciones de 2016 que llevaron a Trump a la presidencia.
«Se debe determinar su fecha de salida, pero será en algún momento en las próximas semanas», dijo Sanders.
Hicks es la tercera persona en ocupar el puesto de director de comunicaciones de la Casa Blanca, después de Mike Dubke, quien dimitió en mayo pasado, y de Anthony Scaramucci, quien tuvo un fugaz pasaje por el cargo a finales de julio.