En medio de una tregua en los combates que sacuden los sitiados suburbios del este de Damasco, un pequeño grupo de cooperantes entró el viernes a la región de Ghouta oriental para entregar la ayuda que no se repartió a principios de semana, dijo el Comité Internacional de la Cruz Roja (ICRC, por sus siglas en inglés).
Un convoy de 13 camiones, que entre otras cosas llevaban paquetes de comida para 12.000 personas, entró a Douma, la localidad con más residentes de la región, explicó el ICRC.
El colectivo repartió la ayuda que no se pudo descargar el lunes durante una misión humanitaria en el enclave que tuvo que acortarse por el deterioro de la seguridad. Los camiones estuvieron parados en el cruce de Wafideen toda la semana esperando poder llevar las raciones de comida y sacos de harina a los residentes de las localidades controladas por los rebeldes.
La operación en Ghouta oriental comenzó el viernes luego de “obtener garantías de seguridad de todas las partes para asegurar que no ocurran incidentes durante la presencia de nuestro equipo” allí, dijo la portavoz del ICRC, Indy Sedky.
La misión se llevó a cabo tras una noche que, según activistas de la oposición y grupos de monitoreo, fue una de las más tranquilas en Ghouta oriental desde que las tropas del gobierno sirio redoblaron su asalto a la región el pasado 18 de febrero. Unas 900 personas han periodo la vida en tres semanas de bombardeos ininterrumpidos.