Gina Haspel, ex subdirectora de la CIA, se convirtió en la primera mujer en dirigir dicho organismo, tras ser nombrada hoy por el presidente Donald Trump en sustitución de Mike Pompeo, quien asumió la Secretaría de Estado.

Haspel, experta en operaciones encubiertas, fue la primera mujer espía que llegó al puesto de número dos de la agencia, y en apenas 40 días volvió a hacer historia al asumir el mando del organismo.

Por su parte, Haspel recordó su experiencia de 30 años como oficial en la CIA y agradeció la “oportunidad” que le han brindado Donald Trump.

Me siento honrada por su confianza, por ser nominada para ser la próxima directora de la CIA. Si hay confirmación, espero aportar al presidente Trump el espectacular apoyo de Inteligencia que él ha contribuido a crear durante su primer año en el cargo”, dijo.

Cabe señalar que es veterana de las operaciones de espionaje, se unió a la CIA en 1985 y sirvió en puestos de todo el mundo, como la embajada estadounidense en Londres.

En 2013 fue nombrada jefa interina del Servicio Clandestino Nacional de la CIA, pero fue reemplazada en pocas semanas debido a que se le involucró en interrogatorios en los que se empleó torturas con agua contra detenidos de una cárcel clandestina en Tailandia.