El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que las dos Coreas tienen su “bendición” para alcanzar la paz y confesó que su gobierno habló directamente con altos dirigentes de Pyongyang.

De acuerdo con el diario The Washington Post, Mike Pompeo, jefe de la CIA y nominado a Secretario de Estado, mantuvo un encuentro secreto con el líder norcoreano Kim Jong-un, en la capital norcoreana, aunque no trascendió nada más sobre la reunión.

Trump alardeó que, sin su ayuda, ambos vecinos y rivales “no estarían discutiendo nada”, al entrevistarse con el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, en su club de Mar-a-Lago, Florida, y poco antes del encuentro del 27 de abril entre el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, y el presidente del Sur, Moon Jae-in.

Corea del Sur va a reunirse con el Norte para ver si pueden poner fin a la guerra y tienen mi bendición sobre eso”, afirmó el presidente de Estados Unidos.

Afirmó que “si todo sale bien” se entrevistará con Kim “a principios de junio o antes”. En la reunión con el premier Abe, el republicano confirmó que ya hubo conversaciones directas a “muy alto nivel” con Pyongyang y dijo que cinco lugares están en estudio para llevar a cabo la histórica reunión.

El protagonismo asumido por Corea del Sur y China en los contactos previos a las cumbres con Pyongyang ha dejado en un segundo plano a Tokio, donde el gobierno de Abe siempre se ha mostrado escéptico respecto al diálogo con Norcorea.

Trascendió que el premier nipón pediría al estadounidense que aborde con Kim el asunto de los japoneses secuestrados por Pyongyang y el cese de todas sus pruebas de misiles.

“Quiero confirmar que se mantendrá la máxima presión sobre Corea del Norte para conseguir la destrucción completa, verificable e irreversible de su arsenal nuclear y balístico”, insistió Abe.

La reunión con el líder japonés es una oportunidad para “solucionar un problema mundial”, dijo el mandatario estadounidense.