El Instituto Bioclon, empresa mexicana de grupo Silanes, dio a conocer que innovó la elaboración de un faboterápico de cuarta generación para neutralizar el veneno de la mordedura de una araña violinista.
De acuerdo con Laboratorios Silanes, el antiveneno se desarrolló a partir de venenos recombinantes; es decir, la producción se llevó a cabo en un laboratorio, con lo que se evita la extracción de la toxina directamente del arácnido.
Agregó que cuando una persona es mordida por la araña violinista, suele ser por accidente al mover objetos en sitios oscuros y secos, que son los escondites de estos arácnidos, que reaccionan al sentirse amenazados y atacan.
Pueden pasar varias horas para que el sujeto se percate de la situación, y comienza a ver que la zona afectada está inflamada y rojiza, además de sentir dolor.
El veneno de esta araña provoca daños irreversibles a nivel de tejido, por ejemplo puede llegar a ulcerar la piel y provocar necrosis; por lo que una mordedura se considera una emergencia médica.
Alrededor del 5 por ciento de los casos por picadura se puede tornar en “una forma grave de intoxicación en cuyo caso podría presentar también falla renal aguda, desorientación, lesión a nivel pulmonar, destrucción de los glóbulos rojos e incluso la muerte”, señaló Jorge González, director científico de Laboratorios Silanes/Bioclon.
El loxoscelismo, cuadro clínico resultante de la mordedura de la araña del género Loxosceles, constituye un importante problema de salud en varios países sudamericanos, centroamericanos y norteamericanos, especialmente en regiones de Argentina, Perú, Chille, Brasil y México, de acuerdo con el Diagnóstico y Tratamiento de Mordeduras por Arañas Venenosas.
