El candidato a la presidencia por la coalición «Todos por México», José Antonio Meade Kuribreña, se mostró confiado en si mismo en este segundo debate, el cual se realizó en Tijuana, Baja California, en el gimnasio de los Cimarrones de la Universidad Autónoma de Baja California.

Junto a su esposa, Juana Cuevas, fue el primero en arribar al lugar de este encuentro, donde agradeció la presencia de los medios de comunicación, así como del público que los acompañaría dentro de este gimnasio, quienes fueron parte activa dentro de este ejercicio, el primero donde ciudadanos cuestionarían de forma directa a los candidatos.

Este segundo encuentro entre candidatos presidenciales, con la ausencia de la ex candidata independiente Margarita Zavala, estuvo moderado por los periodistas Yuriria Sierra y León Krauze, quienes fueron feroces e incisivos con los candidatos.

El TLCAN y las estrategias comerciales

La primer pregunta del público fue sobre que acciones pondrán en acción los candidatos de ganar la elección en cuanto a los tratados de libre comercio.

El candidato, quién fuera en la actual administración de Enrique Peña Nieto secretario de Hacienda, inició diciendo que de entrada, cualquier acuerdo que se realice en su mandato, estará basado en respeto mutuo.

Incluso destacó que en este tema, recientemente en el Congreso de la Unión aprobó un acuerdo con países orientales en aspectos comerciales, mismo que, acusó, fue desdeñado por el partido del candidato por la coalición «Juntos haremos historia», Andrés Manuel López Obrador, Morena.

Cuestionado sobre si durante su trabajo como canciller previó la victoria de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, aseguró que fue una sorpresa para esta administración y que se enfrentaron a un escenario bastante complejo.

 

El salario mínimo

En la segunda pregunta del público, cuestionados sobre que harían para lograr un salario mínimo justo, Meade se congratuló de su trabajo como secretario de Hacienda, «lo hice bastante bien«, afirmó.

Dijo que trabajará por reducir las brechas que existen entre los extremos norte y sur del país con inversión e impulsando el comercio, asegurando que no permitirá que vuelva la escasez que afectó al país en los años ochenta.

Insistió en que la forma de reducir estas brechas que no permiten un salario justo, es la inversión.

 

Crímen y delitos en el país

La tercera pregunta hacia los candidatos fue sobre qué harán para combatir los delitos y crímenes que aquejan a todo el país, ante lo cual, el candidato por la coalición «Todos por México» destacó que cuando fue titular de la SCHP fue parte de la creación del un protocolo aduanal.

Mismo protocolo con el cual buscará reforzar con tecnología la seguridad en las aduanas, lo que permita vigilar la entrada de armas y dinero al país, y asimismo, propuso trabajar en un código penal único para combatir el crimen en México.

El candidato aprovechó para reafirmar su postura ante la propuesta de amnistía de Andrés Manuel López Obrador, de la cual dijo, hace mal, además de «perdonar a criminales», ligar la pobreza con la delincuencia.

Asimismo, pidió al candidato por la coalición «Juntos haremos historia», no tacharlo de demagogo, ya se considera «él único de todos los candidatos que tiene una vida limpia».

 

Protección de los migrantes

Las últimas tres preguntas del público presente giraron en torno a la migración, los dreamers y la reinserción a la sociedad de los deportados de Estados Unidos.

En primer lugar, Meade dijo que trabajará en las comunidades que denominó «De Origen», las cuales dijo que mientras los jóvenes finalicen sus estudios y encuentren trabajo en el país, será menos probable que piensen en migrar al país vecino.

En cuanto a los denominados Dreamers, hijos de migrantes nacidos en Estados Unidos, afirmó que las deportaciones de esta comunidad en realidad iniciaron desde la administración del ex presidente estadounidense Barack Obama, a lo cual Ricardo Anaya, le replicó que no fue así y que está inició gracias a la visita de Trump a Los Pinos durante su campaña presidencial, a lo que cual el candidato tachó de cínico a su contrincante.

Sobre este mismo tema, aseguró que mientras trabajó con la actual administración de Enrique Peña Nieto, se diseñó una estrategia junto con el gobierno de Estados Unidos para, apoyar a los Dreamers que residen en aquel país, pero que de ser deportados se les apoyaría en México.

Asimismo, afirmó que se deberá trabajar no solo con autoridades federales y del país del norte, sino que también las autoridades estatales y locales son fundamentales para apoyar a esta comunidad.

Sobre la reinserción de los migrantes, hizo énfasis en que trabajará para dignificar el trabajo de los migrantes y se buscará apoyar con trabajo a quienes vuelvan al país para «no defraudarlos una segunda vez«.

También, dijo que trabajará para reforzar y fortalecer la frontera para que los migrantes se sientan parte de nuevo de su país.

 

Tras cerrar con este tema, Meade Kuribreña aprovecho para calificar a López Obrador como un «gran empresario», quien dijo, ha usado al partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) para beneficio propio, y le acuso de vivir en la añoranza de un país donde siempre le decían al pueblo que hacer.

Invitó a los votantes a analizar su voto, diciendo «ese México (el de AMLO) no te conviene«.

Para cerrar su participación, el candidato describió el proceso electoral en tres momentos clave: las campañas y debates, la veda electoral que dijo servirá como momento de reflexión y el día de la votación, que describió como ese momento íntimo definitivo donde se «se decidirá el futuro del país».

«Esta es una elección donde escogeremos entre certidumbre y riesgo; entre futuro y pasado».

Confiado, Jose Antonio Meade dijo sin titubear que no tiene duda alguna: «el que va a ganar, soy yo».