El egipcio Mohamed Salah se presentará en ayunas al duelo entre Liverpool y Real Madrid del próximo sábado, debido al Ramadán, una celebración musulmana por la que no puede comer, beber ni mantener relaciones sexuales durante las horas de luz.

Si bien los deportistas tienen derecho a abstenerse de dicha celebración, el delantero habría asegurado que no incumplirá con la costumbre al participar en la final de la Champions League, que se realizará en el estadio Olímpico de Kiev, señalaron fuentes cercanas a él.

También aseguraron que el ayuno «no afectará» a su rendimiento durante el partido y que su familia, sacrificará tres terneros para bendecirlo, como suele hacer antes de sus encuentros importantes.

No obstante, médicos aseguran que cumplir condiciones como las del Ramadán sí afectan el rendimiento de los deportistas.