Estamos a 19 días de elegir a quien presidirá este país por los próximos seis años. No es poca cosa, vamos a señalar a la persona en la cual debemos de confiar para que proponga soluciones a todos los males que tenemos en México.

Hay muchas cosas que estamos seguros que no queremos que sigan ocurriendo. No queremos seis años como los que nos dejó Enrique Peña Nieto, pero tampoco queremos regresar al pasado del priismo imperial, donde todo lo decidía una sola persona.

Por eso, a menos de dos semanas y media de ir a las urnas, es fundamental que ya sepamos lo que queremos. No podemos estar frente a la boleta electoral sin haber razonado nuestro voto. A estas alturas de la campaña, ya debemos identificar qué queremos y qué no.

La decisión la debemos de tomar ya. O aprovechamos el tiempo para escoger bien o tendremos mucho tiempo para arrepentirnos.

Estamos para decidir. O buscamos detener el intento de que en México nada cambie y se retroceda, o equivocarnos como ya lo hemos hecho antes.

Y es que la historia lo ha probado, los pueblos se han equivocado. Nosotros nos hemos equivocado, permitimos 60 años de PRI y hoy, según las encuestas, podríamos aceptar un populismo que destruye el futuro. Te pido que no nos equivoquemos otra vez.

Durante los últimos días he reflexionado en mis redes sociales sobre los tres candidatos presidenciales que tenemos, descuento inmediatamente a el Bronco, es una pérdida de tiempo siquiera referirse a él.

A López Obrador lo he descrito como un populista que busca repartir la pobreza, loco de poder, el ex priista y ex perredista solo nos puede ofrecer un México quebrado y sin esperanza.

A José Antonio Meade lo ubico como alguien que nos engaña, que nos dice que no es priista, pero si lo es; que está ahí para lograr la impunidad que requiere Peña Nieto y sus secuaces.

Y Ricardo Anaya lo he ubicado como el menos peor. Una figura joven, con una nueva forma de hacer política, envalentonado y decidido, rodeado de malas influencias como los 30 integrantes del PRD que quedan en ese partido y de panistas como Rafael Moreno Valle. Sin embargo, su oferta política pareciera ser la menos dañina para México.

Por eso, a 21 días de las elecciones, yo ya sé qué quiero y qué no deseo para mi México.

No quiero a AMLO, porque sólo podrá hundirnos más, sin una propuesta de futuro.

No quiero a Meade, porque sólo premiará al régimen corrupto de Peña Nieto.

Hoy veo a Anaya como un camino distinto con cual se podrá trabajar. No me engaño, con él hay muchas cosas que cambiar, pero lo veo con ese ánimo de construir.

Estamos a pocos días de la elección, el próximo primero de julio tú decidirás el futuro de México, piensa si tu voto te dará pena en seis años o te felicitarás.

Tú eres el único responsable.

No pensemos en opciones que no hay. Son tres candidatos, el del populismo, el de la continuidad de Peña o el de la posibilidad de trabajar para cambiar.

@PedroFerriz