Los incendios forestales que seguían asolando zonas turísticas costeras próximas a la capital de Grecia el martes, calcinando viviendas, autos y bosques, causaron al menos 74 fallecidos, dijeron las autoridades. El conteo de víctimas mortales aumentó tras el hallazgo de 26 personas, se cree que miembros de una misma familia, algunos de ellos abrazados.
Muchos turistas y residentes huyeron hacia la costa escapando de las feroces llamas y del asfixiante humo. Las autoridades evacuaron a más de 700 personas por mar durante la noche, dijo Nektarios Santorinios, viceministro de Marina Mercante, el departamento responsable de la guardia costera.
Pero algunos no pudieron llegar a la playa. Un grupo de rescate de Cruz Roja encontró 26 cuerpos en un complejo al noreste de Atenas, según contó el director del organismo en Grecia, Nikos Oikonomopoulos, a la televisora Skai. En total, el número de fallecidos se elevó a 50 el martes en la mañana, confirmó el vocero del gobierno, Dimitris Tzanakopoulos.
“Todo sucedió en segundos”, señaló Andreaas Passios, que vive cerca del complejo. “Agarré una toalla de playa. Me salvo la vida. La empapé, agarré a mi esposa y corrimos hacia el mar”.
Passios dijo que él y su esposa estuvieron cerca del agua durante dos horas: “Era increíble. Las bombonas de gas explotaban. Las piñas ardiendo volaban por todas partes”.
Cuando las llamas se apagaron, Spyros Hadjiandreou salió a buscar a sus seres queridos.
“Mi sobrina y mi primo se quedaban aquí de vacaciones. No sé si lo lograron”, apuntó. “No sé si están bien. No he tenido noticias de ellos”.
Los dos mayores incendios –uno a 30 kilómetros (20 millas) al noreste de Atenas, cerca de Rafina, y el otro a 50 kilómetros (30 millas) al oeste de la capital, en Kineta– comenzaron el lunes en un clima seco y cálido. Avivados por vientos huracanados que cambiaban de dirección con frecuencia, las llamas se propagaron rápidamente a localidades costeras, demasiado rápido para permitir la huida de los que estaban en sus casas o en sus autos, dijo la portavoz del departamento de bomberos, Stavroula Malliri.
En total, 715 personas fueron evacuadas de playas o desde la costa por buques de la marina, yates y barcos de pesca, agregó Tzanakopoulos, el vocero del gobierno. La guardia costera dijo que rescató a 19 personas en el mar, algunas de las cuales se habían lanzado al agua para escapar de las llamas.
El puerto de Rafina se convirtió en un hospital de campaña durante la noche. Los paramédicos evaluaban a los sobrevivientes, algunos vestidos apenas con bañador, que desembarcaban de los buques de la marina y de embarcaciones privadas. Según los bomberos, 156 adultos, 11 de ellos en estado grave, y 16 menores fueron hospitalizados con heridas.
Entre el lunes y la madrugada del martes se registraron en toda Grecia 47 incendios de diversa consideración, aunque la mayoría se extinguieron rápidamente, explicó el departamento de bomberos. Diez seguían activos a última hora de la mañana del martes, incluyendo en Corinto, Creta y en el centro y norte del país.
Más de 400 bomberos y voluntarios luchaban contra las llamas en los dos incendios próximos a Atenas, respaldados por siete helicópteros y tres hidroaviones.
Grecia ha solicitado ayuda a la Unión Europea. El gobierno de España envió el martes dos aviones anfibios con capacidad para 5,5 toneladas de agua y Chipre desplazó a 60 bomberos. Israel y Turquía se ofrecieron a colaborar con Atenas.
Esta es la temporada de incendios más letal en el país en más de una década. Más de 60 personas fallecieron en 2007 en los fuegos que arrasaron el sur de la región del Peloponeso.