Andrés Manuel López Obrador, virtual ganador de las elecciones presidenciales, sostuvo un encuentro de apenas 30 minutos a puertas cerradas con el embajador de China en México, Qiu Xiaoqi.

El funcionario asiático fue recibido por Marcelo Ebrard, quien ocupará el cargo de secretario de Relaciones Exteriores (SRE), en la casa de transición en la Ciudad de México.

A diferencia de las visitas de personajes norteamericanos, en esta ocasión no se pudo apreciar la asistencia de otros integrantes del equipo del tabasqueño, como Carlos Urzúa u Olga Sánchez, futuros titulares de las secretarías de Hacienda (SHCP) y de Gobernación (Segob).

Al finalizar la reunión, Marcelo Ebrard brindó una rueda de prensa donde reveló que el embajador chino entregó al próximo presidente un par de libros autografiados por Xi Jinping, acerca del desarrollo que su nación vivió en épocas recientes.

Asimismo, le externó una invitación a una exposición que se realizará en Shanghai, cuyo objetivo es impulsar las exportaciones de diversos países a China.

El futuro canciller mexicano consideró la reunión como el inicio de una relación fructífera para ambos países.