Elizabeth de la Rosa, madre del bebé de 8 meses, Tadeo, quien murió por el atentado del pasado 21 de mayo contra un autobús de transporte público en Guadalajara, Jalisco, falleció la tarde del lunes.
Muere bebé que resultó herido en atentado a exfiscal de Jalisco
Dicho atentado ocurrió cuando miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en venganza por la detención de varios sujetos que intentaron asesinar al exfiscal de la entidad Luis Carlos Nájera.
La secretaría de salud de Jalisco informó que la causa de la muerte de Elizabeth fueron las lesiones por quemaduras que tenía en el 90 por ciento de su cuerpo.
Hace apenas una semana Elizabeth volvió a Guadalajara tras ser atenida en una clínica especializada en el tratamiento de quemaduras en Estados Unidos.
En tanto, el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, ofreció su apoyo a la familia de la víctima y se comprometió a hallar, capturar y castigar a los responsables.
Acompañamos a la familia de Elizabeth y Tadeo en este proceso tan doloroso. Su familia seguirá teniendo nuestro apoyo pleno y la garantía de que daremos con los responsables y se hará justicia. Tragedias como ésta nos sacuden a todxs. Jalisco está con ustedes.
— Aristóteles Sandoval (@AristotelesSD) August 21, 2018
Un atentado y un ataque a ciudadanos
El intento de asesinato del exfiscal general de Jalisco y actual secretario del Trabajo de dicha entidad, Luis Carlos Nájera, ocurrió mientras estaba en un restaurante del centro de Guadalajara.
El propio funcionario relató que se percató de la presencia de dos sujetos que ingresaron al lugar para ubicar entradas y salidas, fue cuando el exfiscal identificó a uno de los sujetos como miembro del CJNG, por lo que puso en alerta a sus escoltas y cambió de mesa, lo cual, dijo, lo salvó.
Para escapar Nájera arrancó la camioneta que lo protegió y avanzó a bordo de ella, mientras que elementos policíacos impidieron que un segundo grupo de atacantes lo persiguiera.
Tras la refriega, fueron detenidos varios de los presuntos agresores, lo cual provocó que, en su furia, sus secuaces incendiaran unidades de transporte público, en una de las cuales viajaba Elizabeth con su hijo Tadeo, de apenas 8 meses de edad y quien murió un día después.