Los libros de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) “Ju je uantani. Manual para la enseñanza de la lengua p′urhepecha” y “Los dos hermanos”, obtuvieron el Premio Antonio García Cubas 2018, que otorga el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
De acuerdo con un comunicado, el primer lugar en la categoría de “Libro de texto escolar” fue para “Ju je uantani. Manual para la enseñanza de la lengua p′urhepecha”, de Sue Meneses Eternod e Ismael García Marcelino, quienes son académicos de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) Morelia.
Dicha obra, señaló Sue Meneses, es un manual para la enseñanza de la lengua purépecha que responde a la necesidad de crear un material para la licenciatura en Literatura Intercultural, y ofrece a los alumnos la alternativa de estudiar lenguas originarias.
Explicó que la obra, editada y publicada por el Laboratorio Nacional de Materiales Orales (LANMO), se desarrolló considerando a usuarios que no han tenido aproximaciones previas con esta lengua y cultura, bajo un enfoque comunicativo.
Al respecto, Ismael García indicó que la lengua purépecha se enseña en varias instituciones y ya existen materiales didácticos, pero en la propuesta de los universitarios “se priorizan las herramientas, pues el desarrollo de contenidos, las unidades, su organización y objetivos son claros”.
Además, destacó, se aprovechan tecnologías como audios, porque el libro refiere a grabaciones que el alumno puede consultar en línea.
Este material se encuentra disponible de manera gratuita en la página www.lanmo.unam.mx/jujeuantani y en un futuro se publicará también un cuaderno de ejercicios y recursos complementarios como videos.
Por su parte, “Los dos hermanos”, de Santiago Cortés Hernández y Berenice Granados Vázquez, recibió mención honorífica en “Obra Infantil”.
Se trata de un relato recopilado en Altamira, Tamaulipas, en la voz de Margarita Cruz García, una mujer con una gran capacidad narrativa. Es originaria de El Anono, Veracruz, y su abuela le contaba esa historia cuando era pequeña. Se encuentra ampliamente difundida en la tradición oral de México y se cuentan distintas versiones, indicaron sus autores.
Granados señaló que todas las versiones son válidas, dado que funcionan en la realidad para el público que las escucha y las recrea; sus diferencias se encuentran motivadas en las adaptaciones al contexto.
“Si bien al convertirlo en un producto editorial se fija una versión y se transforma en un objeto que ya no tiene la capacidad de adaptarse a un público específico, la intención es que sean los pequeños quienes se apropien del cuento”, subrayó sobre esta obra también editada y publicada por LANMO.
Cabe destacar que la colección editorial para niños del LANMO pretende que se otorgue el crédito respectivo al narrador o a la persona que produjo el material oral, así como los créditos del lugar y fecha de la documentación.
Además, que se preservan algunos rasgos de la oralidad para que se conviertan en textos que inviten a una lectura en voz alta.