Después de pasar toda la noche estacionados en el Puente Internacional de Ciudad Hidalgo, que conecta con Guatemala, los migrantes hondureños que pretenden dirigirse hacia Estados Unidos comenzaron a cruzar en pequeños grupos.
El puente continúa cerrado al tránsito de personas en ambos sentidos y es vigilado del lado mexicano por un grupo de cerca de 400 policías federales, tanto destacamentados aquí, como otros que llegaron para apoyar en el control por el incremento migratorio.
El cruce de los hondureños se ha dado paulatinamente y en pequeños grupos integrados por 10 a 20 personas cada uno, en su mayoría jóvenes que pasan en las balsas que habitualmente hacen el recorrido en ambas riberas del río que divide a México con Guatemala, sin que autoridades mexicanas les impidan su ingreso a territorio nacional.
Alrededor de las 11:30 horas, algunos de los migrantes que se encontraban en el puente comenzaron a lanzarse al agua tal como lo hicieron ayer otros de sus compañeros para alcanzar el lado mexicano.
La situación continúa igual que ayer, con una tensa calma. Agentes de la policía mexicana -desarmados- permanecen a la espera de instrucciones sobre el manejo de esta crisis migratoria.
Hay personal de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) identificados con chalecos con logotipos de la institución para asistir a los migrantes hondureños en materia de sus garantías.
Durante toda la noche y parte de la mañana de hoy se ha mantenido la vigilancia a través de drones que manejan la Policía Federal y elementos de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), cuyo personal forma parte del operativo de vigilancia.
En el interior de las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM), en el lado mexicano, se encuentran varios autobuses, y al menos cuatro ambulancias para prestar servicios médicos a quienes lo puedan requerir.
Un grupo de ocho trabajadores de la CNDH se encuentran dentro de las instalaciones mexicanas de migración para atender a los centroamericanos que lo requieran.
En las últimas horas, personal de Protección Civil del gobierno de Chiapas ha realizado varios operativos de supervisión y ayuda en la ribera mexicana del río.
Todo se encuentra en las mismas condiciones, con excepción del grupo de migrantes reunido desde ayer en el parque Ciudad Hidalgo, donde se ubica el centro social «Francisco I Madero» que fue habilitado como albergue.
De manera extraoficial se habla de que la caravana de migrantes hondureños alcanza las cinco mil personas con independencia de los casi 500 que ya esperan a sus compañeros en el parque de Ciudad Hidalgo.