La decisión de la canciller federal de Alemania, Angela Merkel, de no enviar por lo pronto exportaciones de armamento a Arabia Saudita a raíz de la muerte del periodista saudí Jamal Khashoggi fue bien recibida por la prensa del país europeo.
La jefa del gobierno alemán emitió el fin de semana un comunicado conjunto con el ministro alemán de Asuntos Exteriores, el socialdemócrta Heiko Maas, en el que expresaron su «conmoción» por la noticia de la violenta muerte de Jamal Khashoggi.
«Condenamos el suceso de la forma mas fuerte. De Arabia Saudita esperamos transparencia en relación a las circunstancias de esa muerte así como su contexto. Las informaciones dadas a conocer hasta el momento (por la parte oficial saudita) sobre lo ocurrido en el consulado en Estambul no son suficientes», señalaron.
Los jefes de la diplomacia de Alemania, Francia y Gran Bretaña emitieron por su parte el domingo un comunicado conjunto en el que se subrayó que los tres gobiernos ponen énfasis en la urgente necesidad de aclarar que fue exactamente lo que pasó el 2 de octubre.
Solicitaron hechos que comprueben la hipótesis planteada por el consulado saudita en Estambul. «Nuestra posición final va a depender de que tan creíbles sean las explicaciones y en qué medida podemos confiar en que un suceso tan vergonzoso no vuelva a tener lugar».
Manifestaron además que esperan que los delitos cometidos sean perseguidos en el marco del estado de derecho. «Vamos a mantenernos en estrecho contacto al respecto con las autoridades sauditas», indicaron.
«La calidad y el significado de las relaciones que tenemos con el Reino Saudita, se basan en el respeto a las normas y valores a cuyo cumplimiento también nuestros socios sauditas están obligados por el derecho internacional», precisaron.
La prensa alemana publicó este lunes en sus primeras planas y portadas análisis y reportajes sobre el presunto asesinato ocurrido en el consulado saudí en Estambul.
La principal revista alemana de investigación periodística, el Spiegel, lleva en la portada de su mas reciente edición la imagen en primer plano del rostro del Príncipe Mohamed bin Salman, y en el trasfondo las caras del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y de Turquía, Recep Tayyip Eerdogan.
«El Príncipe y el asesinato. Un espeluznante crimen conmociona a la política mundial», publicó. El semanario parte de la base de que Khashoggi fue víctima de un asesinato planeado hasta en sus últimos detalles, y perpetrado por funcionarios sauditas del entorno del Príncipe bin Salman. Su cadaver habría sido troceado para eliminarlo.
El principal periódico financiero alemán, Handelsblatt, publicó hoy en su página en línea el comentario de la política liberal (FDP, Partido Liberal) y exministra de Justicia, Sabine Leutheusser Schnarrenberger, con el titular «Se puede también sin ese estado sanguinario de la Edad Media».
El diario de centro-izquierda, Frankfurter Rundschau, escribió que el príncipe árabe ha quedado muy golpeado por los sucesos en el consulado saudita en Estambul. «Los políticos occidentales no pueden continuar actuando (en relación a Arabia Saudita) como hasta ahora, porque demasiados ciudadanos están asqueados por el crimen del Reino Saudita», señaló.
El diario regional Allgemeine Zeitung comentó que «finalmente parece que el gobierno alemán quiere esta vez detener en serio las exportaciones de armamento a Arabia Saudita (que reportan al país) miles de millones».
«La canciller federal deberá además de jugar la carta europea porque muchas de esas exportaciones se llevan a cabo en forma conjunta con los productores de armamento de Francia y Reino Unido», indicó.
El diario regional Mitteldeutsche Zeitung apuntó que Arabia Saudita se propone desde hace tiempo extender su poder al Cercano y al Medio Oriente. Alemania no puede detener las exportaciones estadunidenses de armas a ese país árabe pero si puede dejar de mandarle armamento a dictaduras.
Criticó asimismo al presidente del consorcio alemán de la industria electrónica, Siemens, Joe Kaeser, quien pretende ir la próxima semana al gran evento saudita en Riad para captar enormes inversiones en la modernización de la economía de ese país.
Ese empresario está recibiendo numerosas críticas de la prensa alemana. «Si los puestos de trabajo solo se pueden mantener dando apoyo a asesinos, el precio es demasiado alto».
El diario regional Rheinische Post comentó que la muerte del periodista crítico Khashoggi forma parte de la historia de doble rasero de la casa real saudita, hacia afuera reformador y en lo interior brutal y letal.
La emisora alemana de radio, Deutschland Funk, que emite en todo el país, presenta en su página en línea una entrevista con el presidente de la Confederación de la Industria Alemana (BDI), Dieter Kempf, quien declaró que es correcto que la política alemana refuerce la presión sobre Arabia Saudita.
Los industriales alemanes están de acuerdo con ello, dijo, aunque a algunas empresas les puede parecer doloroso.