La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dio marcha atrás a la Ley de Seguridad Interior, pues fue declarada como inconstitucional al querer regular la participación de las fuerzas armadas en tareas de seguridad nacional.

En la sesión de hoy, nueve ministros votaron a favor y uno en contra sobre el futuro de esta ley, el único apoyo que tuvo la Ley de Seguridad Interior fue por parte de su mismo autor, Jorge Pardo Rebolledo, quien mencionó que no violaba la Constitución siempre y cuando se eliminaran algunos artículos.

La ministra Margarita Luna Ramos que había anunciado también su voto contra la ley, tuvo que salir del Pleno previo a la votación, motivo por el cual esta no quedó 10 a 1, sin embargo esto se veía venir desde el martes pasado, cuando seis ministros ya mostraban su rechazo para avalar esta ley.

Por otra parte, los argumentos en contra de la ley fueron similares a los expuestos por los otros ministros el martes pasado y que se resumen en tres puntos principales, el Congreso no tenía facultades para legislar, volver a los soldados policías y el “fast track del Congreso.

Además de que el ministro presidente de la SCJN, Luis María Aguilar Morales, votó en contra de la Ley de Seguridad por otras razones, pues concordó con el proyecto de Pardo Rebolledo en el sentido de que el Congreso sí cuenta con las facultades para legislar en la materia, pues se distinguen adecuadamente los conceptos de seguridad interior y pública.

Sin embargo, Aguilar Morales hizo énfasis en que la anulación de algunos artículos dejaría desarticulada a una ley que no fue pensada sin ellos, situación que no solo la volvía poco práctica sino peligrosa.

Una ley desarticulada puede generar un mal mayor a la actuación de las fuerzas armadas. Peor el contexto no se puede ignorar y debe construirse otra norma (…) Por eso me inclino por la invalidez total”, dijo el ministro presidente.