Ignacio “El Fantasma” Suárez dio a conocer, por medio de su columna en el diario deportivo Récord, una réplica al caso anónimo de un joven ex canterano de Pachuca, que ante la falta de oportunidades emigró por consejo de un amigo a la Sub-20 del Veracruz.
No obstante se topó con duras realidades que lo han orillado a desertar de su sueño, puntualmente por un caso de abuso sexual entre los encargados de fuerzas básicas en Tiburones Rojos.
Quien acusa señala que cuando cumplió los 17 años, estaba bloqueado por Roberto de la Rosa, goleador en la cantera Tuza y seleccionador de categorías menores de México.
Por ello, contó la historia a un amigo que milita en fuerzas básicas de Tiburones, quien le facilitó el nombre de Ángel Fuentes, persona con presuntos enlaces con Veracruz, así que el joven abusado lo contactó por llamada. La respuesta fue inmediata y el sueño parecía avanzar pues al poco tiempo lo registraron en cédula oficial de la Liga MX con su NUI (Número Único de Identificación) para participar en la Clausura 2018.
El texto de Suárez es sustentado con capturas de una conversación de WhatsApp entre Ángel Fuentes (presunto representante de la categoría juvenil de Veracruz) y la víctima de la agresión.
En las imágenes de la plática por celular, se ve como Fuentes dice al chico que gracias a él ha sido convocado a la banca en algunos partidos del Veracruz, y que sólo él falta de debutar en su categoría, pero para ello es necesario que el joven se “rife”. Más tarde la víctima se enteraría que la expresión “rifarse” es usada en el estado costero para referirse a practicar sexo oral.
📝La directiva del Club Tiburones Rojos de Veracruz informa:#VibraEnMiSer 🔴🔵🦈 pic.twitter.com/o8Dk2FpHug
— Tiburones Rojos 🦈 (@ClubTiburones) 15 de noviembre de 2018
Fuentes había prometido a la víctima un salario de más de 3 mil pesos, cuestión que tardó en verse reflejada a extremos de que el joven tuvo que presentarse con él para cobrarlo, sin embargo esa noche sucedió algo imborrable en la mente del joven futbolista, para describirlo basta con leer a como evitó Suárez hablar de lo ocurrido:
“El chico fue, a donde la experiencia le hubiera gritado que NO lo hiciera. Por respeto a Bernardo ‘N’ y a mis lectores, NO relataré lo que sucedió aquella noche en la casa de la calle de Nogal”.
Después de la amarga experiencia, el joven destrozado pidió dinero prestado para poder regresar con su familia desde el Puerto de Veracruz en el que trató de perseguir su sueño solo. Tras meses de silencio, la víctima reveló su experiencia a sus padres, quienes finalmente levantaron una denuncia por el delito de abuso sexual contra Ángel Fuentes.
El periodista deportivo enfatiza que lamentablemente podrá no ser la única víctima de una situación así en el futbol mexicano, pero pidió a su gremio no callar y aportar con más testimonios para desde “su trinchera” dejar el tabú y combatir la problemática.
