La defensa del Joaquín «El Chapo» Guzmán intentó desacreditar el testimonio del último testigo presentado por la Fiscalía, el narcotraficante colombiano Juan Carlos Ramírez Abadía, conocido también como Chupeta.

En su turno de preguntas, los abogados de «El Chapo» han intentado demostrar que Ramírez mintió al gobierno de Estados Unidos, incluso antes de que este fuera extraditado desde Brasil, en 2008.

El abogado William Púrpura mostró documentos de la supuesta contabilidad que llevaba Chupeta, jefe del cártel Norte del Valle, en los que están registrados los envíos de cocaína al cártel de Sinaloa, controlado por «El Chapo».

Asimismo, en estos documentos, como destacó Púrpura, hay una sección dedicada a los pagos realizados por asesinatos, en la que se incluyen unos 150 registros, entre ellos uno por una suma de 338 mil 776 dólares.

El testigo, que durante las dos pasadas jornadas relató pormenorizadamente la relación entre su organización y la de El Chapo Guzmán durante los años 90, precisó que dicha suma había sido tan elevada porque el asesinato fue llevado a cabo por sicarios colombianos.

La defensa también sugirió que Chupeta habría ordenado el asesinato de su principal lugarteniente, Laureano Rentería, quien fue envenenado cuando se encontraba en prisión en Colombia.