Un reciente estudio reveló que las crías de la araña saltarina (Toxeus magnus), un tipo de araña saltarina que imita el aspecto de las hormigas, dependen por completo de la leche que les proporciona su madre, al igual que los mamíferos. 

Araña

El artículo publicado en la revista Science demostró que estas arañas alimenta a sus crías con un fluido similar a la leche –– la cual contiene casi cuatro veces más proteínas que la leche de vaca –– incluso después de alcanzar la capacidad de alimentarse por su cuenta.

Durante un estudio de campo, un grupo de investigadores chinos observando cómo era el cuidado materno en arañas. Al mirar más de cerca, se percataron que las arañas jóvenes no salían del nido para alimentarse por sí solas hasta que tenían 20 días de edad. Por lo que se preguntaron: ¿qué comían en esos días?

La araña no tiene zonas mamarias tradicionales como pueden ser los pezones o ubres. En cambio, tiene una pequeña abertura en su abdomen denominado “surco epigástrico” desde donde fluye la leche de araña. Este surco es un órgano en la parte inferior de las arañas hembra utilizadas para poner huevos.

En comparación con la leche de vaca, la leche de esta araña es cuatro veces más alta en proteínas pero tiene menos grasa y azúcar.

Con microscopio, los especialistas observaron cómo las gotas de ese líquido procedía del surco epigástrico de la madre. Durante los primeros días la araña deja las gotas de leche en la superficie del nido, de donde las crías la sorben, pero posteriormente la consumen directamente del abdomen maternal.

El cuidado maternal y el uso de la “leche”, permite la supervivencia hasta la edad adulta (unos 50 días) del 76% de las crías.