La Unión Europea en su conjunto sostuvo este sábado que podría reconocer al líder opositor Juan Guaidó como presidente legítimo de Venezuela si el gobierno actual no anuncia nuevas elecciones en los próximos días.

No obstante, el régimen del dictador Nicolás Maduro rechazó los posicionamientos de gobiernos europeos sobre un plazo para convocar a elecciones libres.

«¿De dónde sacan ustedes (…) que pueden dar un ultimátum a un gobierno soberano?», preguntó el canciller Jorge Arreaza en una sesión especial del Consejo de Seguridad sobre Venezuela. «Nadie nos va a dar a nosotros plazos, ni nos van a decir si se hacen elecciones o no» en Venezuela, afirmó.

La jefa de política exterior de la UE, Federica Mogherini, dijo en un comunicado que el bloque europeo intensificará los contactos con sus aliados internacionales “en las próximas horas” sobre la crisis de Venezuela.

La UE pidió urgentemente nuevas elecciones, diciendo que el voto presidencial de Venezuela el año pasado no fue democrático.

Mogherini dijo que “en ausencia de un anuncio sobre la organización de nuevas elecciones con las garantías necesarias en los próximos días, la UE tomará nuevas medidas, entre ellas la cuestión del reconocimiento del liderazgo del país”.

Momentos antes el mismo sábado, los gobiernos de España, Francia, Alemania y Gran Bretaña fijaron un plazo de ocho días para que el venezolano Nicolás Maduro convoque nuevas elecciones presidenciales.

La posición de los europeos abre un nuevo frente en sus tensiones con Rusia, que apoya fuertemente a Maduro.

A Alemania, Francia y España, se sumó Gran Bretaña como los gobiernos que han puesto un plazo al régimen de Maduro para convocar a elecciones.

El secretario de Relaciones Exteriores británico, Jeremy Hunt, dijo que Gran Bretaña reconocerá a Guaidó a menos que el gobierno del presidente Nicolás Maduro anuncie la celebración de nuevas elecciones en un plazo de ocho días.

Alemania, Francia y España hicieron anuncios similares horas antes.

Hunt se quejó en un tuit de que la elección de Maduro se vio empañada por “la prohibición de candidatos de la oposición, el embutido de urnas y numerosas irregularidades en una elección profundamente defectuosa”.

“Está claro que Nicolás Maduro no es el líder legítimo de Venezuela”, aseguró.