El lunes pasado, el periódico francés Le Monde dedicó un artículo al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, destacando la labor del “izquierdista” a favor de transparentar la función pública y el derecho al acceso a la información.

En esencia abordó la naturaleza de las más recientes decisiones del mandatario: desclasificar miles de documentos que forman parte de los archivos secretos de la vieja Inteligencia nacional.

El propio Le Monde señaló que hasta el propio López Obrador fue víctima también del espionaje del aparato de Estado bajo los años de gobierno del Partido Revolucionario Institucional (PRI); es decir, que siendo candidato y durante los años que estuvo haciendo horas y días de incansable proselitismo recorriendo la geografía, AMLO (como se le conoce en toda Europa) fue espiado por dicho aparato de Inteligencia.

Como lo indicó el influyente periódico galo ahora hay “un final para el espionaje político” porque el presidente López Obrador decidió anunciar que habrá libre acceso a muchos documentos que han formado parte de un “régimen autoritario”. Y hegemónico, con el PRI gobernando desde 1929 hasta el año 2000 y luego de 2012 2018.

También recordó que tres meses después de la investidura de AMLO el líder nacional ha perdido perdón a las víctimas de “las horas negras” del PRI; y decidió firmar un decreto para desclasificar cerca de 10 mil documentos conservados en los archivos nacionales.

Son dossiers, agregó Le Monde, que contienen décadas de “violaciones a los derechos  humanos” cometidas por la Dirección Federal de Seguridad que en 1989 se convirtió en el CISEN.

Se trata de servicios de espionaje: el medio informativo refirió que el mandatario mexicano habló de  una “policía política” de la que él intenta poner distancia de por medio, tras obtener una amplia victoria electoral con el 53% de los sufragios a su favor.

Él quiere marcar una ruptura con las prácticas clientelares y represivas del PRI que han perdurado inclusive durante la alternancia política con el PAN de 2000 a 2012”, destacó el medio francés.

A COLACIÓN

Aquí en Europa, la figura de López Obrador genera cierta cautela y digamos que los analistas y asesores de todos los niveles están tentando el terreno con el nuevo gobierno; no ven con malos ojos que suceda una corrección en materia socioeconómica a favor de políticas más incluyentes que reduzcan las enormes brechas y distancias vergonzosas entre los que nada tienen y los que tienen mucho.

Por ese lado no les preocupa AMLO, porque Europa ha vivido en sus carnes un desgaste de su Estado Benefactor y ahora ya se dice abiertamente que hay pobreza cuando antes cualquier disparidad se abordaba en términos de exclusión.

Tampoco ven ilógico que con su nuevo gobierno y tras una victoria histórica (tanto como en su momento la representó la llegada de Vicente Fox, del PAN, a la Presidencia en julio de 2000) él quiera provocar un revulsivo y enterrar mucho de la añeja estructura priísta con la que no está de acuerdo.

Quizá lo que más inquieta tiene que ver con las decisiones en materia de política económica y de tratamiento de las inversiones, hace unos días abordé en mi columna que los inversores españoles confiaban en México y para 2019 tenían previsto incrementar sus flujos en el país azteca, según lo señalado en el Informe Panorama de Inversión Española en Iberoamérica.

Si bien están aguardando para participar en la licitación del tren Maya no es el único proyecto que les interesa y también hay otros en los que tienen tiempo dentro y confían en que no serán alterados.

Mientras las diversas consultoras y calificadoras de riesgo estadounidenses empiezan a darle notas negativas a los primeros cien días de desempeño del gobierno lopezobradorista, en Europa aún creen que no pasará nada que altere la economía del país.

El gobierno de AMLO tiene que tener muy claro cuál es el mensaje que quiere transmitir en las cosas del comer y de hace negocios para no provocar un nerviosismo innecesario en tiempos de por sí locos de atar en el ámbito internacional.

Directora de Conexión Hispanoamérica, economista experta en periodismo económico y escritora de temas internacionales.