Como venganza porque la empresa dejó de pagar su salario y el de sus compañeros, un obrero destruyó cinco casas nuevas en Buntingford, Inglaterra, utilizando una excavadora; o al menos eso es lo que dice en el video.

El sujeto de 31 años grabó el suceso, cuyo costo se calcula en un millón de libras esterlinas –unos 25 millones 496 mil 752 pesos–, con una cámara Go Pro y un celular y luego paseó entre los escombros de los edificios.

Por su “desquite”, el hombre de origen rumano fue condenado a pasar cuatro años en la prisión.