Por lo general el cáncer rectal afecta a las personas en una etapa más avanzada de sus vidas; sin embargo algunos estudios médicos están mostrando una tendencia desconcertante sobre el alto incremento de este padecimiento en pacientes cada vez más jóvenes.
En promedio la edad de diagnóstico de este tipo de cáncer ha disminuido de 67 a 63 años de edad, pero actualmente hay registros de un número creciente de personas de entre 30 y 40 años que están siendo diagnosticados con cáncer rectal más frecuentemente.
De acuerdo con el doctor Dr. Juan Nogueras, medico cirujano colorrectal del departamento de cirugía de Cleveland Clinic Florida, hoy día no hay una respuesta definitiva sobre cuáles son los factores que contribuyen con el aumento de casos de cáncer rectal, pero existen algunas posibles razones.
“La teoría es que el cáncer rectal proviene de una acumulación de mutaciones que pueden volverse cancerosas con el paso del tiempo; por lo tanto, se cree que el riesgo de cáncer aumenta con el tiempo” comentó el doctor Nogueras.
El aumento de la incidencia en pacientes más jóvenes no se debe a la ausencia de un chequeo médico ya que este no se recomienda hasta los 50 años. Se sabe que las personas más jóvenes con factores de riesgo genético, enfermedad intestinal inflamatoria o colitis ulcerativa, tienen mayores posibilidades de padecer esta enfermedad. Sin embargo, en las estadísticas no se han incluido los grupos de mayor riesgo, así que estos no contribuyen con esta nueva tendencia de cáncer rectal en personas más jóvenes.
La preocupación principal, destacó el cirujano de Cleveland Clinic Florida, es el crecimiento acelerado del número de adultos de mediana edad con cáncer rectal que no presentan estos factores de riesgo.
“Lamentablemente, los pacientes más jóvenes y sus médicos pasan por alto los síntomas debido a la edad, pero es importante considerar realizarse un chequeo acompañado de una colonoscopia si existe un cambio en los hábitos intestinales como dolor abdominal o sangrado rectal”, explicó el especialista.
En etapas 1 o 2, si el cáncer se limita a la pared del intestino y no se ha extendido a los ganglios linfáticos, detalló, más del 90% de los pacientes pueden curarse en esta etapa, de allí la importancia de un diagnostico temprano. Si avanza a la etapa 3, el cáncer se ha extendido a los ganglios linfáticos y la tasa de curación disminuye a un 67%. En etapa 4, el cáncer se ha extendido al hígado o los pulmones y únicamente el 10% de estas personas continúan vivos en un periodo de cinco años.
El también jefe del programa nacional de acreditación para cáncer rectal, habló sobre la importancia de que los adultos de cualquier edad consulten a su médico de cabecera si notan algún sangrado rectal; ya que, por medio de pruebas estándar como un examen rectal digital o sigmoidoscopia, pudieran ayudar a un diagnostico temprano del cáncer rectal. “Con la prevalencia del cáncer colorrectal, actualmente se recomienda la evaluación a los 45 años de edad para todos los pacientes de riesgo estándar o no”, concluyó el médico Juan Nogueras.