El asesino que mató a disparos a 12 personas en un edificio municipal de Virginia Beach fue identificado por la policía este sábado como un hombre que trabajaba desde hacía 15 años para la ciudad después de revistar en el ejército y fue descrito por vecinos como callado y raramente sonriente.
El jefe de policía de Virginia Beach, James Cervera, identificó al agresor como DeWayne Antonio Craddock, ingeniero en el departamento de servicios públicos de la ciudad. Craddock murió en un tiroteo con la policía. Cervera se excusó de hablar sobre sus posibles motivos.
Dave Hansen, un empleado municipal, dijo que Craddock seguía siendo empleado municipal en el momento del ataque y poseía una credencial de seguridad que le permitía entrar a las secciones del edificio a las que no tenía acceso el público en general.
Craddock, de 40 años, se graduó de la escuela secundaria Denbigh High School en 1996 y se enroló en la Guardia Nacional del Ejército, según un recorte de periódico de la época.
Craddock parece no haber tenido antecedentes penales, lo que lo habría hecho elegible para comprar armas de fuego.
Varios vecinos dijeron que Craddock era pulcro, miembro de la junta de la asociación de vecinos y pasaba mucho tiempo en el gimnasio. También dijeron que era muy reservado, especialmente después de que su esposa lo dejara hace algunos años.
Angela Scarborough, que vive en el vecindario, dijo que “era muy callado… sólo ondeaba la mano para saludar”.
Dijo que ella conoció a su esposa, pero que se fue hace algún tiempo. “Simplemente se fue”, dijo Scarborough. “No nos hizo saber algo ni nada más”.
La policía informó que recuperó “armas adicionales” que estaban en posesión del sospechoso. Cervera dijo que las armas fueron recuperadas tanto en el sitio del tiroteo como en su casa.
Las autoridades dedicaron parte de la conferencia de prensa del sábado a las víctimas. Hansen dijo que 11 de las 12 víctimas eran empleados municipales, cuya ausencia “deja un vacío que nunca podremos llenar”.
Las autoridades han dicho que el agresor abrió fuego con una pistola en el edificio municipal el viernes por la tarde, matando a 12 personas en tres pisos y haciendo que sus compañeros de trabajo corrieran aterrorizados a tratar de esconderse antes de que la policía lo matara a disparos después de un largo enfrentamiento a tiros. Otras cuatro personas resultaron heridas en el tiroteo del viernes, entre ellas un policía cuyo chaleco antibalas le salvó la vida, precisó Cervera.
Visiblemente afectado por el ataque, el alcalde Bobby Dyer dijo que ha sido “el día más terrible en la historia de Virginia Beach”.