El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó hoy nuevas sanciones financieras contra Irán, que afectarán al líder supremo Ali Jamenei y a ocho comandantes, además de advertir que seguirá aumentando la presión sobre Teherán.
Frente a las cámaras, Trump firmó en la oficina oval el decreto para imponer “duras” sanciones a Irán, como un paso más del cerco económico sobre la república islámica y forzar una negociación sobre un nuevo acuerdo nuclear, según la cadena CNN.
Cuando firmó la orden ejecutiva de las sanciones, Trump dijo “vamos a seguir aumentando la presión sobre Teherán. Nunca pondrá Irán tener un arma nuclear”, además señaló que el líder supremo de Irán es el responsable último de la actitud hostil del régimen.
Las sanciones prohibirán a Jamenei y a otros comandantes iraníes el acceso a recursos financieros bajo jurisdicción estadunidense, lo que supone la primera represalia de Estados Unidos tras el derribo de un avión no tripulado estadunidense por parte de Irán la semana pasada.
Las medidas establecen no sólo que cualquier activo bajo jurisdicción de Estados Unidos queda bloqueado, sino que las instituciones financieras de otros países que faciliten alguna operación a los individuos afectados pueden ser expulsados del sistema financiero estadunidense, básico para cualquier entidad.
El jefe de la Casa Blanca precisó que las sanciones responden a una serie de comportamientos agresivos del régimen iraní en las últimas semanas, incluido el derribo de un dron estadunidense en el espacio aéreo internacional sobre el estrecho de Ormuz.
Poco antes, en su cuenta de Twitter, Trump reclamó este lunes a Irán a renunciar a obtener armamento nuclear y dejar de “patrocinar” el terrorismo, además llamó a los países que utilizan el estrecho de Ormuz a proteger sus propios buques.
“China obtiene el 91 por ciento de su petróleo a través del estrecho, Japón un 62 por ciento y otros muchos países igual. Así que por qué protegemos las rutas marítimas para otros países (durante muchos años) sin compensación», escribió.
Agregó que «esos países debieran proteger sus propios barcos en lo que siempre ha sido un viaje peligroso. ¡Ni siquiera necesitamos estar allí cuando Estados Unidos se ha convertido (de lejos) en el mayor productor de energía del mundo!«, enfatizó.
Las tensiones entre Estados Unidos e Irán aumentaron el jueves pasado tras el derribo de un avión no tripulado estadunidense en el estrecho de Ormuz que, según Washington, estaba en el espacio aéreo internacional, pero según Teherán fue interceptado en sus cielos.