Los colores del arcoíris; rojo, naranja, amarillo, verde, cian, azul y violeta pintan camisetas, banderas, coronas y tenis, que portan los miembros de la comunidad LGBTTTI, así como familias, amigos y colectivos de apoyo, que este día marchan del Ángel de la Independencia, en Paseo de la Reforma, rumbo al Zócalo capitalino para celebrar el Día Internacional del Orgullo Gay.

El contingente, integrado por aproximadamente medio millón de personas, este sábado sale a las calles de la capital mexicana para exigir respeto y tolerancia en el país, segundo a nivel mundial en el que se comenten más asesinatos en su contra.

Los “TTT”, travestís, transexuales y transgénero, llenan de brillo la caminata; con zapatillas, lentejuelas y maquillaje avanzar con orgullo, junto a comerciales, colectivos, amigos y familiares que ofrecen su apoyo, al tiempo que ríen y posan para tomarse fotos con sus coloridos atuendos.

Entre los que marchan este 29 de junio se encuentra María, una transexual, cuya madre, Estela de 44 años de edad, la acompaña y la ayuda a colocar su vestuario; para ambas el camino ha sido difícil, sin embargo “ella me tiene a mí y yo a ella; mi esposo nos dejó, pero he entendido que amor es amor, sin importar si tu hijo tiene una identidad distinta”.

María dice sentirse bendecida por ser aceptada y apoyada, y reconoce que muchas en su lugar son abandonadas o maltratadas.

Por su parte Javier, joven homosexual de 23 años, asegura que la lucha sigue, porque si bien se han ganado algunas libertades aún el camino es largo; “tenemos que seguir”.

Considera que el gobierno federal ha restado instituciones a favor de la comunidad LGBTTTI por la política de presunta «austeridad», hecho que señala “no lo podemos permitir”.

En la retaguardia de la marcha, Benjamín grita con orgullo “es un buen día para ser yo mismo” y explica que en la oficina y en su vida cotidiana no utiliza tacones y aretes pero hoy puede salir y disfrutar, “me gustaría que todos los días fueran así, sin odio”.