El primer ministro canadiense Justin Trudeau y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, criticaron este día los comentarios racistas del presidente Donald Trump y se comprometieron a combatir todas las manifestaciones de odio y de incitación a la violencia.
«Es un placer estar en Montreal, la más europea de las ciudades canadienses. Realmente me siento como en casa aquí, por muchas razones, también porque en Montreal no escuché a nadie gritar: ‘Envíenlo de vuelta’”, señaló el funcionario europeo en una rueda de prensa conjunta con Trudeau.
«Durante años he sido uno de los políticos más pro-estadounidenses en Europa; es difícil entender algunos de estos hechos, estas palabras y, a veces, si sientes que algo es totalmente inaceptable, debes reaccionar a pesar de los intereses comerciales», agregó Tusk, y aclaró que no quiere intervenir en la política interna de Estados Unidos.
Estos comentarios «son dolorosas e inaceptables y creo que nadie en Canadá considera que estas palabras son aceptables, porque no lo son», sostuvo por su parte el primer ministro canadiense, en alusión a las declaraciones de Trump contra cuatro congresistas demócratas.
Durante su reunión, ambos líderes criticaron los comentarios del mandatario estadunidense, quien el pasado fin de semana escribió en su cuenta de Twitter, refiriéndose a cuatro legisladoras demócratas: «regresen y ayuden a reparar los lugares totalmente rotos e infestados por el crimen de donde vinieron».
El mensaje de Trump iba dirigido a las congresistas Alexandria Ocasio-Cortez, por Nueva York; Ayanna Pressley, por Massachusetts; Rashida Tlaib, por Michigan, e Ilhan Omar, por Minnesota, pese a que todas son ciudadanas estadunidenses (solo Omar emigró a Estados Unidos desde Somalia a los 10 años y obtuvo la naturalización).
En la declaración final de la cumbre, ambos líderes se comprometieron a reforzar el combate a todas las manifestaciones de odio y de incitación a la violencia, reportó la agencia Europa Press.
Trudeau hizo además un llamado a la Unión Europea (UE) para fortalecer su cooperación en la lucha «contra los movimientos populistas y nacionalistas que minan la democracia en el mundo».
Durante el encuentro en Montreal, Trudeau y Tusk abordaron el Acuerdo Económico y Comercial Global (CETA por sus siglas en inglés) entre la Unión Europea y Canadá, que entró en vigor bajo lo que se conoce como aplicación provisional, en septiembre de 2017.
Hasta el momento, solo 12 de los 28 Estados miembros de la UE han ratificado el CETA; entre los países que no lo han hecho están Francia y Alemania, de acuerdo con la emisora Radio Canadá Internacional.
La comisaria de Comercio de la UE, Cecilia Malmstrom, manifestó que el convenio comercial ya ha logrado «resultados tangibles» y anticipó que cuando se aplique de manera total, traerá «incluso más beneficios».
Trudeau y Tusk acordaron además duplicar el financiamiento para la investigación y desarrollo de las denominadas «tecnologías verdes» y firmaron un convenio de colaboración para proteger los océanos y preservar su diversidad.