El director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Yukiya Amano, ha fallecido hoy a los 72 años.

Amano, un exdiplomático japonés, tenía una amplia experiencia en iniciativas de desarme y no proliferación, así como en cuestiones de energía nuclear, y desde 2009 lideraba la agencia que regula los asuntos nucleares a nivel mundial.

Su fallecimiento coincide con una época de creciente preocupación y tensiones en torno al programa nuclear iraní, después de que Estados Unidos abandonara un acuerdo de 2015 alcanzado con varias potencias internacionales que restringía el enriquecimiento de uranio en el país.

Yukiya Amano trabajó muy de cerca en las negociaciones del tratado nuclear con Irán, que se prolongaron durante años.

El OIEA anunció el lunes la muerte de su director sin detallar su causa ni la fecha exacta, e indicó que sus banderas ondearían a media asta en señal de duelo.

Amano tenía previsto enviar pronto una misiva a la Junta de Gobernadores para anunciar su decisión de renunciar al cargo, señaló el OIEA. En esa carta daba las gracias a la agencia por ofrecer “resultados concretos para lograr el objetivo de ‘Átomos para la Paz y el Desarrollo’”, según la secretaría del organismo.

También decía estar “muy orgulloso de nuestros logros y agradecido” a los estados miembros y al personal del OIEA.

Además de las conversaciones con Irán, Yukiya Amano contribuyó a las Conferencias de Revisión del Tratado de No proliferación Nuclear en 1995, 2000 y 2005, y presidió el Comité Preparatorio en 2007 para la edición de 2010 de la conferencia periódica.

Fue el representante de Japón en la agencia desde 2005 y hasta ser elegido como director general en julio de 2009, un periodo que incluyó un periodo como presidente de la Junta de Gobernadores entre 2005 y 2006, según la biografía ofrecida por la agencia.

Amano, que se graduó en la Facultad de Derecho de la Universidad de Tokio, entró en el Ministerio japonés de Exteriores en 1972, que le destinó a lugares como Bélgica, Francia, Laos, Suiza y Estados Unidos.

En el Ministerio de Exteriores fue responsable del Departamento de Desarme, No proliferación y Ciencia entre 2002 y 2005. Antes sirvió como experto del gobierno ante el Comité de Naciones Unidas sobre Misiles y el Grupo de Expertos de Naciones Unidas sobre Educación en No Proliferación y Desarme.