El Ford Mustang de 1968 utilizado en la película Bullitt fue subastado el viernes en Florida por 3.74 millones de dólares, el precio más alto en la historia pagado por un ejemplar de este popular modelo.

El propietario, Sean Kiernan, con su hermana Kelly Cotton, en el asiento del copiloto, condujo el vehículo de Bullitt sobre la plataforma de subastas en la Silver Spurs Arena y luego se dirigió a la multitud de unas 25 mil personas antes de que comenzaran las pujas.

Este automóvil se ha vendido en dos ocasiones durante su existencia. Ha pertenecido a mi familia por 45 años. Cada vez que se vendió, fue en 3 mil 500 dólares”, señaló Kiernan. “Así que vamos a empezar en ese precio y continuaremos a partir de allí”.

La casa de subastas Mecum Kissimmee publicó en YouTube un video de 11 minutos de la puja.

Las ofertas superaron los 3 millones de dólares en el primer minuto. Una persona presente y un postor vía telefónica se alternaron en efectuar la oferta más elevada durante varios minutos hasta que ganó el que estaba en el teléfono, de quien no se reveló su nombre.

El padre de Kiernan, Robert, adquirió el vehículo tras verlo anunciado en un ejemplar de la revista Road & Track de 1974, y la familia de Nueva Jersey lo usó para sus necesidades diarias hasta que el embrague se descompuso en 1980.

A fines de la década de 1970, Steve McQueen, que protagonizó Bullitt, buscó a los Kiernan y les preguntó si podía recuperar el auto canjeándolo por un Mustang similar, pero ellos declinaron.