Una mujer de 63 años con diabetes e hipertensión se negó a quedarse en casa porque asegura que no tiene quien la mantenga, ni quien la ayude.
María de Jesús además tiene sobrepeso y dice saber que está en riesgo de ser contagiada por el Covid-19, pero aún así sale a la calle.
“Se de antemano que me puedo morir, pero Dios me dio la vida y él me la va a quitar. Ahora si yo me vuelvo a refugiar ¿quién me va a dar de comer, o darme algo para sostenerme?”
La mujer fue entrevistada en calles del municipio de Naucalpan.